● Una campaña publicitaria que responsabiliza a las sanciones económicas y a la oposición de la escasez de insumos y productos se observó en varias vías de Caracas, a pocos días del cierre de las sustituciones de los candidatos para las elecciones de julio 2024.
● El registro de la fallida candidata de la Plataforma de la Unidad Democrática (PUD), Corina Yoris, en la página del Consejo Nacional Electoral fue modificado para colocar el apellido de su esposo de nacionalidad uruguaya.
● El candidato de la Unidad (ahora sí de toda la oposición no representada en la Asamblea Nacional 2021), Edmundo González Urrutia, pasó a ser el blanco predilecto de la desinformación a través de la usurpación de identidad en redes sociales y una guerra sucia que utilizó una conversación suya con comentarios desafortunados en junio de 2015.
La ruta electoral del oficialismo luce trastocada a juzgar por las más recientes acciones y decisiones con las que el gobierno parece apostar a la división en la oposición y a la confusión entre el electorado, incluyendo laboratorios de guerra sucia durante la tercera semana de abril.
A escasos días de que expirara la Licencia General 44, que flexibilizó sanciones impuestas por EE UU a operaciones petroleras y gasíferas de Venezuela por 6 meses, y el plazo de sustitución de candidaturas de cara a las elecciones presidenciales del 28 de julio, una serie de vallas que responsabiliza a la oposición por las sanciones llamaba la atención de conductores y transeúntes en algunas vías principales de Caracas.
De acuerdo con la campaña desplegada por el gobierno de Maduro, las sanciones impuestas en 2017 a solicitud de la oposición, según se lee en las vallas, bloquearon fondos para la importación de insulina, retuvieron insumos y repuestos que afectaron al sector automotor, bloquearon el transporte de combustible e impidieron el tránsito de buques venezolanos.
EsPaja desmontó la versión gubernamental verificando el caso de la escasez de insulina.
Pero no solo la estrategia busca engañar a la población con información falsa, sino reducir a la oposición política para provocar hartazgo y desánimo entre los votantes.
Después de haber impuesto varias trabas tanto en el país como fuera de él para el registro de nuevos votantes y actualización de datos de los ya inscritos, el Consejo Nacional Electoral (CNE) modificó el nombre de Corina Yoris Villasana, candidata de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), cuya postulación impidió el CNE sin que hasta el 22 de abril se haya presentado algún argumento.
Corina Yoris Villasana, nombre con el cual aparecía en el Registro Electoral, ahora figura con el apellido de su esposo fallecido, de nacionalidad uruguaya: Piacenza.
Al introducir la cédula de identidad de Yoris se puede observar el cambio:
Este cambio en el Registro Electoral se produjo luego de que algunas cuentas en redes, incluso la de la exministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela, señalaran que la profesora Yoris tenía la nacionalidad de su esposo, afirmación desmentida por autoridades uruguayas. La inclusión del apellido del esposo de Yoris en su registro en la página web del CNE afianza la narrativa de desinformación, según la cual Yoris tiene doble nacionalidad, lo que sería un impedimento en su pretensión de postularse como candidata presidencial. Corina Yoris solo tiene nacionalidad venezolana, como ya fue verificado por EsPaja.
El candidato tapa que pasó a ser la opción presidencial de la Unidad
El cronograma electoral del CNE, que debió publicarse en Gaceta Electoral hace mes y medio cuando se anunció la fecha de la elección (28 de julio), fue publicado el 22 de abril en Gaceta Electoral Extraordinaria N° 46 con fecha 6 de marzo. Allí se establece que la fecha tope para la modificación y sustitución de postulaciones para que se refleje en la boleta electoral era el 20 de abril.
La PUD que había inscrito al diplomático Edmundo González Urrutia como “candidato tapa” para asegurar la participación de la tarjeta de la Unidad en el proceso del mes de julio, lo ratificó como la opción opositora tras un acuerdo alcanzado, el 19 de abril, entre los partidos representados en la PUD, María Corina Machado de Vente Venezuela y Manuel Rosales, candidato de Un Nuevo Tiempo (UNT), apoyado por Movimiento Por Venezuela (MPV) y Fuerza Vecinal.
La decisión de Rosales de renunciar a su candidatura a favor de Edmundo González, en pos de la unidad, puso a correr al gobierno. Hasta la tarde del 22 de abril, momento de elaborar este informe, UNT, MPV y Fuerza Vecinal no habían podido hacer el cambio ante el CNE por “impedimentos del ente electoral”, que optó por otorgar una prórroga de 72 horas (hasta la medianoche del 23 de abril) para la sustitución de candidatos y por la que se esperan sorpresas.
El nombre de Edmundo González, desconocido por la mayoría de los venezolanos, cuenta ahora con el respaldo unitario de la oposición no representada en la Asamblea Nacional oficialista.
Para “darlo a conocer” se activó una guerra sucia desde el oficialismo. En redes sociales se ha viralizado un audio de una conversación de Edmundo González con comentarios racistas y misóginos, hecho en junio de 2015 a propósito de las elecciones parlamentarias de diciembre de ese año, y para las que el CNE solicitaba que 40% de las postulaciones debía ser de mujeres.
Cuentas en X (antes Twitter) de organismos públicos como el Ministerio del Comercio Nacional o militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en funciones parlamentarias como Winston Vallenilla, difundieron la conversación del hoy candidato presidencial de la Unidad.
Las baterías de la desinformación se enfilan hacia Edmundo González, a cuyo nombre se ha creado una multiplicidad de cuentas en Instagram que él mismo ha alertado que son falsas, como quedó registrado en una nota de EsPaja.
Pero además se han creado imágenes con la interfaz de su cuenta en X @EdmundoGU con contenido falso, como lo verificó Efecto Cocuyo con una supuesta publicación en la habría escrito: “Hugo Chávez, como cáncer llegó como cáncer se fue”.
Con mes y medio transcurrido desde que se notificó la fecha de la elección presidencial, carrera de la que Luis Ratti (Derecha Democrática Popular) y Juan Carlos Alvarado (Copei reconocido por el TSJ) se retiraron el 22 de abril para apoyar a Luis Eduardo Martínez (AD reconocido por el TSJ), la desinformación ha sido abundante. Y todavía restan tres meses.