Subsistimos con todas las privaciones con las que sobreviven los presos en las cárceles venezolanas. Tras las rejas, con la basura rodeándonos, mientras la gusanera se pasea por los cerros de desperdicios.
Cuando ustedes se vayan, llévense la oscuridad, el destrozo, la suciedad, las groserías, la tristeza, que esta Venezuela volverá a ser la ribera de la espuma, de las garzas, de las rosas ¡y del sol! | Foto El Ucabista