El populismo como instrumento de poder basa todo en el resentimiento, en la ignorancia adrede de los ciclos históricos que nos han consolidado como nación.
Ser un escarrastrao no es pecado, en lo absoluto, es una manera liberal de vivir sin ataduras, permisada por la nomenclatura, en algunos casos requisito de la oligarquía reinante.
Desde hace muchos años se sabe que habitamos un país de pinga, laxo hasta lo increíble, donde la coima y todo su protocolo acuoso levantó de la modestia a mucho inescrupuloso y malviviente.
Estamos sujetos a una malévola ecuación de la destrucción de la lógica, es allí que nos enseña su cuerpo de gorila la incertidumbre, la que alimenta con buenas dosis el miedo.
Petkoff falleció el miércoles, a los 86 años | Foto cortesía
Siento gran alegría por este reconocimiento a Pedro Suárez, quien además de ser un poeta a cabalidad estuvo fomentando por décadas el arte en la Villa del Yocoima sin descanso.
A propósito de la muerte de Leopoldo Villalobos, reproducimos la ponencia presentada por el escritor Francisco Arévalo en un acto homenaje a quien fue conocido como el cronista de Guayana en el V Encuentro de poetas y escritores del estado Bolívar, en 2016, en el Museo de Arte Moderno Jesús Soto.
Tener escrúpulos es saludable, tenerlos en exceso es enfermedad. Los escrúpulos tienen que ver con moral y ética. Si tienes escrúpulos puedes ser bueno en el oficio que elijes, pues mantendrás códigos de excelencia y calidad que son determinantes a la hora de cuantificar el tejido complejo en que nos movemos los seres sociables.