Los indígenas waraos más tradicionales que arriban a Tucupita, capital de Delta Amacuro, se encuentran con una realidad que sigue vulnerando su cultura: las instituciones del Estado no han garantizado las facilidades para su atención y una de las trabas más comunes es el idioma.
Los waraos mantienen su cultura y lengua materna intactas pese a la adaptación que han tenido que asumir frente a la interculturalidad cada día más presente en el mundo. No obstante, el Estado venezolano no ha asumido algunas leyes establecidas que protegen al indígena frente a algunas desventajas que históricamente han tenido que afrontar.
La mayoría de los waraos que acuden a instituciones como el Registro Civil, el Seniat, el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) o a alguna entidad bancaria no cuentan con personas que puedan orientarlos haciendo uso de su idioma.
El equipo de Radio Fe y Alegría Noticias verificó este lunes la inexistencia de alguna persona que hable el idioma warao en instituciones como el Saime, Registro Civil, Seniat y en ninguna entidad bancaria, para así orientar a los indígenas que en varias ocasiones han sido maltratados por algunos trabajadores de estas instancias por no poder hacerse entender.
Raúl Martínez, de la comunidad indígena Santa Rosa de Araguao, a unas 4 horas vía fluvial desde Tucupita, denunció el 10 de noviembre que una de las trabas que presentó a la hora de reclamar ante el Saime de tener problemas con su cédula de identidad fue el idioma. Martínez apenas hablaba el español y quienes lo atendían no lograban comprenderlo.
¿Qué dice la ley de pueblos indígenas?
El artículo 62 de la Ley de Pueblos y Comunidades Indígenas establece que “todo indígena tiene derecho a la identificación a través del otorgamiento de los medios o documentos de identificación idóneos, desde el momento de su nacimiento, los cuales serán expedidos por el órgano competente en la materia, mediante el procedimiento respectivo, el cual atenderá a la organización social, cultural, usos y costumbres, idiomas y ubicación geográfica de los pueblos y comunidades indígenas. El procedimiento se regirá por los principios de gratuidad, transparencia, igualdad, celeridad, responsabilidad social, no discriminación y eficacia. Se garantiza a los indígenas el pleno derecho a inscribir en el registro civil sus nombres y apellidos de origen indígena”.
El Estado venezolano sigue en deuda con los pueblos indígenas no solo desde el punto de vista de los servicios básicos, alimentación y educación intercultural bilingüe, sino también desde aspectos claves como el derecho a su idioma en todos los amplios contextos donde se desenvuelven. Y para ello también existen varios profesionales waraos preparados en diferentes áreas académicas dispuestos a asumir esta responsabilidad.