El Congreso de Estados Unidos aprobó este viernes un proyecto de ley en el que solicita a la directora nacional de Inteligencia, Avril Haines, que desclasifique información relativa al origen del COVID-19.
La propuesta que elaboró el senador republicano Josh Hawley ya cuenta con el positivo del Senado, con el apoyo unánime de los 419 miembros de la Cámara de Representantes. Ahora solo falta la firma del presidente Joe Biden.
Según una reseña publicada por la agencia EFE, los especialistas aún no se ponen de acuerdo sobre el origen del mortal virus que cobró la vida de más de 7 millones de personas en el mundo. Un millón de estas muertes ocurrió en Estados Unidos.
Norteamericanos piden que la información sea pública
El documento señala que los estadounidenses tienen razones para creer que su surgimiento se remite a un laboratorio del Instituto de Virología de Wuhan, en China, por lo que instan a Haines a “desclasificar y poner a disposición del público toda la información posible”.
“La transparencia es una piedra angular de nuestra democracia”, señaló al respecto el representante de mayor jerarquía de la Comisión de Inteligencia, Jim Himes, durante el debate.
También en el documento se pide investigar sobre el virus en el laboratorio de Wuhan antes de que surgiera el COVID-19, e inclusive, el registro de enfermedades en los empleados durante el otoño de 2019 y también los hospitales donde los atendieron.
Estados Unidos es uno de los países que espera tener los resultados de la investigación para así poder tomar las medidas necesarias y evitar futuras pandemias, destaca el documento y que de aprobarse la ley, la desclasificación podría darse en los siguientes tres meses.
“El pueblo estadounidense merece respuestas a cada aspecto de la pandemia de COVID-19: cómo se creó el virus y, específicamente, si fue un hecho natural o producto de un evento relacionado con el laboratorio”, comentó el legislador republicano Michael Turner, presidente de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes.
