viernes, 7 febrero 2025
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Alertan que uso de silicona en inyecciones puede causar complicaciones mortales

El cirujano venezolano Juan Francisco Hurtado asegura que en Florida han logrado recuperar a 249 pacientes infectados por cirugías con biopolímeros realizadas en Brasil, Colombia y Venezuela.

“La remoción de la inyección ilegal de silicona en el área glútea, con un nuevo protocolo para el manejo médico, está logrando mucho éxito”, aseguró Juan Francisco Hurtado, haciendo referencia al trabajo que realiza en conjunto con un grupo de médicos norteamericanos, rusos, cubanos, colombianos y venezolanos, que integran un equipo de alta especialización en Florida.

Sobre el procedimiento, Hurtado explicó que las consultas y tratamiento ambulatorio se realizan bajo la dirección y responsabilidad de César Velilla, médico de origen colombiano conocido como el Dr Lipo, en la Clínica Evolution MD.

Según explicó el especialista, las inyecciones de silicona (ISI) están prohibidas en Estados Unidos y más de un centenar de países, debido a que pueden causar complicaciones médicas potencialmente mortales en pocos días, o incluso décadas después de recibirlas, debido a la presencia de una sustancia aceitosa comúnmente utilizada en lubricantes y calafateo.

Agregó que el equipo médico ha tenido participación directa en el estudio retrospectivo, descriptivo y observacional de 249 pacientes infectados por las inyecciones de biopolímeros (silicona) en tratamientos médico quirúrgicos para agrandar y embellecer senos, glúteos y otras partes del cuerpo.

“El ISI puede causar coágulos, inflamación crónica, infecciones y muerte”, alertó y continuó diciendo que en el caso de los pacientes atendidos por el equipo médico al cual pertenece desde 2014, todos fueron examinados antes de la cirugía y tenían un historial positivo de ISI (silicona, biopolímeros) y a todos se les hizo resonancia magnética para descartar infecciones y para evaluar la extensión, cambios inflamatorios y grado de infiltración.

Detalló que muchos de los infectados se quejaban de dolor de moderado a severo, con cambios en el color de la piel y endurecimiento de las áreas glúteas y que, a un paciente con hallazgos moderados a graves se le inyectaron 16 mg de dexametasona IV durante 3 días. Algunos pacientes necesitaron dosis adicionales de metilprednisona durante 5 días y colchicina 0,6 mg durante un mes, para reducir la respuesta inmune inflamatoria de la silicona. En otros casos la resonancia magnética sin contraste mostró cambios inflamatorios de moderados a graves, con áreas de necrosis localizada sin signos de infección.

Refirió que de los 249 pacientes tratados, 100% mostraron mejora de síntomas subjetivos como dolor, decoloración y endurecimiento en la piel, y 12 casos requirieron al menos una succión adicional para lograr mayor extracción de residuos de silicona y asegurar una mejora más sintomática. Esta técnica, subraya el especialista, no elimina en su totalidad la silicona en el cuerpo humano.

“Existen técnicas más agresivas para obtener una mayor extracción del biopolímero, pero el resultado estético no es el más adecuado”, por lo cual el equipo recomienda una segunda intervención quirúrgica para corregir eventuales deformidades consecuencia de la primera operación.

Como buena noticia para los afectados, Hurtado enfatizó que la silicona se puede extraer de forma segura por succión con anestesia local y general y que la reacción inflamatoria producida por el gel de silicona en el cuerpo se puede tratar de forma segura con dosis altas de esteroides durante períodos cortos o, en algunos casos, con dosis a largo plazo de metilprednisolona o colchicina, con respuesta leve a moderada desde el comienzo del tratamiento.

Juan Hurtado es egresado de la Universidad de Oriente y antes de radicarse en Miami ejerció en hospitales y clínicas de Guayana y otras zonas, entre ellas Puerto La Cruz. Los interesados en ampliar esta información pueden escribir al correo de Hurtado: [email protected].