viernes, 29 marzo 2024
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Familias sustitutas: La esperanza para niños trujillanos sin hogar

El Servicio Administrativo de Protección del Niño, Niña y Adolescentes del estado Trujillo (Sapnnaet) se encarga del programa de colocación familiar, que ayuda a niños, niñas y adolescentes a encontrar un cálido hogar y, si es posible, una futura adopción. El ente manifiesta que su misión es brindar una segunda oportunidad a las nuevas generaciones.

El Servicio Administrativo de Protección del Niño, Niña y Adolescentes del estado Trujillo (Sapnnaet) se encarga del programa de colocación familiar que ayuda a niños, niñas y adolescentes a encontrar un cálido hogar y, si es posible, una futura adopción. El ente manifiesta que su misión es brindar una segunda oportunidad a las nuevas generaciones.

Un grupo de niños juega pelota en las instalaciones del complejo de Carmania, ubicado en el municipio Valera, específicamente en la vía hacia la población de La Puerta del estado Trujillo. Ellos forman parte de los niños y niñas bajo el abrigo del Servicio Administrativo de Protección del Niño, Niña y Adolescentes del estado Trujillo (Sapnnaet), un ente que arropa los consejos de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de los 20 municipios de la región.

Betxi Blanco, coordinadora legal en el Sapnnaet, declaró al diario Los Andes, que el rango de edad de los niños oscila entre los 0 a 17 años y la principal causa por la cual están en la institución es la violencia en su núcleo familiar, el cual ponía en riesgo su vida. Todo empieza con una denuncia o alerta en los consejos de protección municipales, luego una posterior visita y la aprobación de una medida de abrigo.

“Los niños llegan por una serie de situaciones independientes, por medio del consejo de protección de cualquier municipio. Ya sea de Valera, Betijoque (Rafael Rangel), Sabana de Mendoza, si se demuestra por medio de tribunales que son vulnerables al estar en su casa, por abuso, maltrato, entre otros, entonces se los lleva el Sapnnaet por un período de 30 días”, declaró Blanco.

Si en esos 30 días no hay un cambio de actitud comprobable en los padres o cuidadores, quedan completamente a cargo de la institución. Sin embargo, no todos los niños y niñas son susceptibles de ingresar al programa de colocación familiar o adopción. Solamente pueden beneficiarse aquellos a quienes se le han agotado los nexos de consanguinidad en tres generaciones, ya que algunos reciben visitas de sus abuelos o tíos, por ejemplo.

En ese caso, los niños y niñas esperan que sus familiares sean evaluados para otorgar los permisos para ser cuidados por ellos. En el caso de que no haya una solicitud, los niños pasan al programa de colocación familiar. De acuerdo a la abogada, esta es una medida otorgada por el Estado para brindar un hogar a los infantes, una especie de segunda oportunidad.

Banco de familias

Aunque las autoridades no ofrecieron cifras de cuántos niños atienden bajo este programa, la sede podría albergar más de 20 niños, una parte de ellos están bajo cuidado y otros destinados al programa de colocación familiar. Según la abogada de la institución, todo inicia con un banco de familias, es decir, quienes desean formar parte del programa de colocación, deben postularse para tal fin en la sede del Sapnnaet.

El Sapnnaet trabaja de la mano con los consejos de protección de NNA de los municipios y el Idenna

“La institución se encarga de dar una capacitación y orientación a las familias que desean ser sustitutas. ¿Quiénes son? Pueden ser matrimonios o mujeres solteras, que lleven los requisitos a la sede y cumplan con una evaluación del equipo multidisciplinario, que está conformado por psicólogos, trabajadores sociales, abogados y psicopedagogos”, detalló Blanco vía telefónica.

Una vez completado este paso, quedan en un banco de familias, que podrán optar para recibir un niño o niña en sus hogares. Pese a eso, el proceso para quienes desean adoptar es distinto, de esto se encarga el Instituto Autónomo Consejo Nacional de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes (Idenna), donde acuden los padres para entregar a los niños directamente a una adopción plena.

En el Sapnnaet el proceso inicia con la evaluación de la familia, sus preferencias y perfil, que deben coincidir igualmente con las necesidades de los niños y adolescentes. El proceso comienza con la medida de colocación, y una serie de visitas de seguimiento durante dos años, de forma bimensual o trimestral. Finalmente, de ser satisfactoria la relación, se lleva a una adopción a cargo del Idenna.

“Lo indispensable es brindarle un hogar a cada niño, por eso esa decisión de esos padres sustitutos debe ser la más acertada, para que no sean devueltos a la institución, porque en distintas ocasiones se les destrozaron sus sueños de tener una familia”, detalló la abogada, quien añadió por ese motivo se toman en serio la evaluación de los candidatos. Actualmente existen familias en espera de poder albergar un niño en su casa y brindarle todo el apoyo y afecto que se les ha negado.

Se espera un final feliz 

Los niños entre 0 y 7 años son más propensos a ser adoptados bajo el programa de colocación familiar

De acuerdo con los funcionarios consultados, el promedio de las familias que ingresan al programa visualizan niños de entre 0 y 7 años de edad. En ese caso ¿Qué sucede con los niños más grandes? Blanco indicó que el Sapnnaet es financiado directamente por la Gobernación de Trujillo y todos los niños en abrigo tienen acceso a una alimentación adecuada (en las escuelas), educación y otros insumos que necesiten.

Debido a las pocas familias, salvo algunas excepciones, que busquen niños de mayor edad, algunos permanecen en la institución hasta llegar a sus 18 años. Una vez cumplida esta edad se les ofrece una especie de beca trabajo con organismos como Protección Civil o el Cuerpo de Bomberos de Trujillo. No obstante, esto puede cambiar si alguna familia decide albergar a adolescentes en sus hogares. Algo que sucede raras veces, pues de 10 familias entre 8 o 9 tienen la ilusión de albergar a niños de 0 a 6 años.

Vale mencionar que aunque se llegue a un final feliz, este es apenas un comienzo. Tanto si el niño es devuelto a su núcleo biológico o forma parte de uno nuevo, las personas estarán bajo seguimiento por un tiempo más. Al mismo tiempo las personas deberán presentar estudios para descartar el consumo de drogas o enfermedades infectocontagiosas. Una vez esto pasa, se puede decir que finalmente los niños, niñas y adolescentes tendrán una nueva oportunidad.

Requisitos para el programa 

Entre los requisitos que solicita el ente para optar a este proceso, el primero es tener el deseo de brindar amor y oportunidades a un niño o niña, luego consignar los siguientes documentos: 2 fotos tipo carnet (de los postulantes), original y copia de acta de matrimonio, unión estable de hecho (o de soltería en caso de ser soltera), original y copia de constancia de trabajo, 2 copias de la cédula de identidad de ambos, original y copia de referencias personales, 2 copias de partida de nacimiento si tienen hijos, manifestación de los hijos, original y copia de constancia de buena conducta, informe médico, exámenes de laboratorio (VIH y VDRL). Documentos anexados en dos carpetas con ganchos y antecedentes penales.