Para el ensayista y crítico cinematográfico, Rodolfo Izaguirre, hay una realidad que supera la ficción: Juan Vicente Gómez aún vive. Venezuela, según dice, tuvo una democracia imperfecta, “pero mejor que la mejor dictadura”. A sus 91 años desea vivir algo más para contemplar el final de la película del socialismo del siglo XXI.
– ¿Visionario?
– Cada vez que me pongo los anteojos veo turbio.
– ¿Alguna relación entre su obra Alacranes, publicada en 1966, y un sector de la oposición de hoy?
– En mi novela Alacranes, los adecos torturan a los medinistas, hoy los socialistas del siglo 21 torturan a la oposición.
– ¿Un título cinematográfico para la Venezuela del siglo XXI?
– Titanic parte dos.
– ¿Qué tiene de socialista el socialismo del siglo XXI?
– Lo que tengo yo de imbécil.
– A sus 91 años, ¿con cuál presidente se vivía mejor?
– Creo que con Isaías Medina Angarita, pero yo era adolescente en ese entonces.
– ¿Tuvimos democracia o un ensayo de ella?
– Hemos tenido una democracia imperfecta pero mejor que la mejor dictadura.
– ¿Es la vida un ensayo?
– No. ¡Es una aventura!
– ¿Qué tiene usted de venezolano?
– Nací en este país, pero aún no sé qué significa tener algo de bueno o de malo.
– ¿Qué no tiene de venezolano?
– La echonería.
Hijos de Putin
– ¿Qué tiene Putin de Hitler?
– Es lo contrario: ¿Qué tuvo Hitler de Putin?
– ¿Y Maduro de Chávez?
– Ambos son hijos de Putin.
– Después de usted, ¿quién es “la historia del cine en Venezuela”?
– Me pregunto si ese quién ya habrá nacido.
– ¿Por qué no ha emigrado?
– Vuelvo a decirlo: tengo que cuidar a mis helechos.
– Con cuatro años más de “revolución”, ¿qué será de Venezuela?
– Respondo con otra pregunta: ¿qué hay debajo de un maloliente pantano?
– ¿Es la propaganda del régimen como el cine de los teléfonos blancos en la Italia fascista de Mussolini?
– En aquellos teléfonos discurría una pavorosa ideología. En la propaganda de este régimen discurre la torpeza.
– ¿Qué se niega a aprender el venezolano?
– A ser más tolerante.
– ¿Qué le asombra, aún?
– Que aún corra algo de sensibilidad por las arterias del país.
– Winston Churchill decía que quien después de los 30 seguía siendo comunista, no tenía cerebro, pero usted lo fue hasta los 50…
– Siempre he sido lento, pero ahora no troto… ¡corro!
– ¿Diferencias entre el PCV de Gustavo Machado y el de hoy?
– ¡Gustavo Machado fue un señor!
– El PCV de hoy se la pasa cuestionando al régimen de Maduro…
– ¿La basura contrariando a la suciedad?
– ¿Y el PSUV?
– ¿Existe? Vuelvo a preguntar: ¿Qué hay debajo del pantano?
– ¿Con AD y Copei se vivía mejor?
– ¡Nunca hemos vivido mejor!
– ¿Quiénes volverán?
– Espero que no sean las oscuras golondrinas.
– ¿Una nostalgia cinematográfica?
– On a Clear Day You See Forever (¡aunque solo sea por el título!).
– ¿Heredó algo su papá: “coronel” del ejército gomecista?
– ¡No heredó nada y yo nada de él!
– ¿Un militar admirable del siglo XIX?
– No me gustan los militares.
– ¿Uno del siglo XX?
– Me gustan menos.
– ¿Y del XXI?
– ¿Los hay?
Noqueo fulminante
– ¿Un golpe necesario en la historia?
– ¡Que algo la sacuda y la noquee!
– ¿Una realidad que supere a la ficción?
– ¡Que Juan Vicente Gómez permanezca vivo!
– ¿Ensaya esta revolución?
– ¡En medio del ensayo le cayó encima el telón y de vaina no la aplastó!
– ¿Y la oposición?
– ¡No la dejaron entrar!
– ¿Será eterno el diálogo entre los dos bandos?
– Pregunte mejor si será eterno el monólogo porque la mujer del exdictador de Rumanía, Nicolae Ceaușescu, decía: ¡Cuando dialogo no quiero que me interrumpan!… y la fusilaron.
– En el fondo, ¿se parecen tanto los dos bandos que se confunden?
– Son como los colombianos: unos van a misa de ocho y otros a misa de once.
– ¿Una autocrítica nacional?
– Sé escribir la palabra catástrofe, pero me da miedo escribir la palabra miedo.
– ¿Rige en Venezuela un populismo sin popularidad presidencial?
– Lo que impera es perversidad y corrupción a niveles de alarmante popularidad.
– ¿Extraña Punto Fijo?
– ¡Nunca he sido adeco, tampoco copeyano! ¡Jamás he sentido afecto por ningún punto fijo! ¡Adoro el movimiento!
– ¿Por qué, 64 años después, se extraña a Pérez Jiménez?
– Fue un fascista ordinario, perverso y autoritario, pero quería al país.
– ¿Cómo sobrevive hoy un cineasta en Venezuela?
– Sobrevive fuera de Venezuela.
– De vuelta a la democracia, ¿volvería al aire con su Cinemateca del Aire?
– Tengo más de noventa años y no tengo tiempo para ninguna Cinemateca. Ando muy ocupado tratando de vivir un poco más para ver cómo termina esta película del socialismo del siglo 21.