El Observatorio de Universidades (OBU) presentó una evaluación sobre la inseguridad en los establecimientos de salud a lo largo del país y determinó que 45% de los residentes de medicina han sido víctimas de algún delito en los últimos seis meses.
Los centros de salud pública venezolanos se han convertido en blancos frecuentes de los delincuentes que atacan a los universitarios de la medicina.
La ONG especifica que 38% han sufrido agresiones, 28% amenazas, 19% hurtos y 16% robos en el último semestre de este año 2022.
Además explican que las precariedades del sistema hospitalario posibilitan las factores de riesgo más comunes.
Las agresiones, amenazas y falta de seguridad interna abren la puerta a que se registren los delitos en los centros asistenciales.
Condiciones de estudio y trabajo
El mismo observatorio reseñó que 4 de cada 10 universitarios pueden atender a los pacientes por los insumos que ellos mismos llevan, debido a que las autoridades solo aportan 19% de los implementos requeridos mientras que, las gobernaciones ayudan con 12% y las ayudan internacionales abarcan 14%.