Toda actividad turística sobre el tepuy Kasuri está vetada por los indígenas pemones. Este miércoles la decisión fue ratificada como una medida para proteger el “santuario de los ancestros”.
También prohibieron el sobrevuelo en helicópteros, aviones o incluso drones sin una consulta y aprobación previa de los pemones.
“Quedan totalmente prohibidas las actividades turísticas en aeronaves de ala rotatoria (helicóptero). Así como aeronaves no tripuladas denominados drones en los lugares sagrados que no han sido autorizados, ni consultados al pueblo pemón Kamarakoto”, indica el comunicado avalado por el capitán general, Domingo Castro.
Además fueron enfáticos al exigir a las autoridades nacionales a no permitir ninguna actividad comercial, menos aquellas de cuestionada moralidad como las “pijamadas, orgías y fiestas afines”.
La medida es ratificación de las decisiones tomadas después de la controversial fiesta en el tepuy Kasuri en Canaima, Bolívar, donde uno de los personajes más excéntricos en acudir fue Osmel Sousa, y otros empresarios ligados al gobierno de Nicolás Maduro.
Después de la ilegal fiesta se hicieron públicos varias fotografías que mostraban la destrucción de parte del ecosistema al ubicar carpas para los invitados. Este acto provocó la destrucción de la flora endémica del lugar causando daños irreparables al tepuy.