Habitantes de Pueblo Guri denuncian que desde hace tres semanas el aseo urbano dejó de pasar por las calles. Los desechos sólidos comienzan a acumularse en las casas atrayendo moscas y alimañas.
Señalan que hace dos meses la compactadora dejó de recoger los residuos domésticos dos veces a la semana. La recolección se hace una vez a la semana.
Muchos habitantes queman o congelan los desechos. Otros optan por arrojarlos al Módulo de Salud de Pueblo Guri. El sistema de recolección de basura en todo el estado Bolívar es crítico, y aunque constituye un problema de salud pública permanece fuera de la agenda pública de las autoridades.
“Muchos de nosotros congelamos algunas cosas. Yo le echo los residuos vegetales a mis plantas para no acumular tanto. Lo que necesitamos es que se restituya el servicio del aseo”, manifestó una residente.
En Ciudad Guayana, en sectores como Campo Rojo, en las orillas del río Caroní, los vecinos han optado por arrojar los desechos al cuerpo de agua para que la corriente se la lleve. Cuando el río tiene un nivel bajo, la juntan en una playa cercana para incinerarla. Ambas alternativas son consecuencia de la ausencia de servicio de recolección de residuos, lo que genera un pasivo ambiental con potenciales afecciones a la salud.
