miércoles, 19 febrero 2025
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Escasez de gasolina y gas hacen de Bolívar el tercer estado de mayor conflictividad social durante julio

Durante julio se registraron 46 protestas en el estado Bolívar, 13 de ellas relacionadas con el despacho de gasolina, según datos del Observatorio Venezolano de Conflictividad Social.

A diferencia de junio, cuando la región andina de Venezuela ocupó los primeros lugares de conflictividad social, en julio las protestas se centraron en la región oriental. El estado Sucre registró 178 protestas, seguido de Anzoátegui con 85, Bolívar con 45, y Falcón y Monagas con 45 cada una. Esto con base en el monitoreo mensual del Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS).

El observatorio destaca que “el acceso a los servicios básicos es uno de los mayores problemas que enfrentan las familias venezolanas de todo el país. 37% de las protestas del mes pasado fue para exigir gas doméstico. A diario se registraron al menos ocho protestas, para un total de 242 acciones ciudadanas. Por servicio de agua se documentaron 84 protestas y 37 por electricidad”.

Las principales modalidades de manifestación ciudadana fue el cierre de calles o avenidas (322), seguido de las concentraciones (216).

Son precisamente las deficiencias en los servicios públicos básicos lo que ha incidido en que los ciudadanos incumplan la cuarentana, sometidos a largas horas en cola para comprar una bombona de gas, abastecerse de gasolina o comprar agua.

“Desde marzo, rigurosos controles de movilidad ciudadana han sido implementados con el argumento de mitigar la propagación del COVID-19. Sin embargo, la población no ha tenido acceso a derechos fundamentales para evitar el contagio del coronavirus y garantizar la permanencia en el hogar”, señala el OVCS.

“El deficiente servicio de agua no solo afecta el desenvolvimiento de hábitos de higiene personal y actividades domésticas, la problemática trasciende hasta hospitales donde pacientes crónicos no pueden acceder a sus tratamientos por falta de agua y hasta los campos e industrias donde el agua es indispensable para los procesos productivos”, agrega el informe.

De las 649 protestas registradas en todo el mes, 37 fueron por electricidad. Las fallas eléctricas se han asociado también a los problemas de conectividad telefónica y de internet. Esto afecta a su vez el teletrabajo, administrar, asistir las clases virtuales y mantener operaciones comerciales.

Protestas por gasolina

Bolívar también ocupó el tercer lugar en manifestaciones por gasolina. En todo el país fueron 88. Monagas lidera el índice de protestas por escasez de combustible con 22 reclamos, seguido de los estados Anzoátegui con 21, Bolívar con 13 y en Lara 8.

“Esta problemática afecta la prestación del servicio de transporte, sobre todo en el interior del país, obligando a los ciudadanos a recorrer largos trayectos a pie. Por otra parte, el transporte fluvial de zonas como Delta Amacuro se ha visto seriamente afectado, pues la falta de combustible imposibilita la dotación de alimentos, medicinas y otros productos importantes para las familias que habitan estas zonas”, detalla el informe del OVCS.

De las más de 600 protestas en Venezuela, 149 fueron para exigir derechos laborales. El Observatorio precisa que “al menos cinco protestas diarias fueron protagonizadas por médicos, educadores, trabajadores petroleros, de las industrias básicas y hasta de empresas privadas”.

Por otra parte, pese a amedrentamientos y amenazas, se dieron 91 protestas en rechazo a las precarias condiciones de los hospitales y red del sistema de salud pública, dotación de materiales e insumos de uso común y de bioseguridad.

“Al cierre de julio, desde que se anunciaron los primeros casos de COVID-19 en Venezuela, han fallecido 30 profesionales de la salud. El personal médico denuncia que está siendo obligado a trabajar sin las condiciones mínimas de resguardo a su integridad y, por ende, a la de sus pacientes. Reclamar o denunciar las irregularidades, así como ausentarse de sus labores por dificultades a acceder al combustible puede convertirlos en blanco de asedio laboral, amedrentamiento y suspensiones”.

El OVCS documentó aproximadamente 41 protestas de jubilados y pensionados, pertenecientes a Pdvsa, IVSS, Sidor y otras instituciones de Estado.

Además, 36 protestas estuvieron relacionadas a reclamos por altos precios en los alimentos y productos, a consecuencia de la devaluación del bolívar. “Adicionalmente aumentaron las denuncias por los controles de movilidad que dificultan hacer las compras diarias para la alimentación familiar. Mientras, continuaron los retrasos en la entrega de las cajas de los CLAP y la recepción de alimentos en mal estado o en cantidades insuficientes para cubrir la dieta proteica familiar”.

Durante julio, el OVCS documentó siete saqueos e intentos de saqueos en tres estados: Anzoátegui (5), Sucre (1) y Trujillo (1). Estos saqueos se relacionaron con la sustracción por la fuerza de alimentos, línea blanca, medicinas y otros productos que pueden ser consumidos, intercambiados o vendidos.

Control social

En julio fueron reprimidas 17 protestas en ocho estados del país. El saldo fue de al menos dos manifestantes asesinados.

El 16 de julio asesinaron por herida de arma de fuego al pescador Joe Luis Albornoz Paz, de 18 años, durante una protesta en rechazo a irregularidades en la venta de gasolina en la Isla de Toas, en el Zulia. Testigos señalaron a funcionarios de la Guardia Nacional como responsables del hecho.

El 25 de julio fue asesinado por herida de arma de fuego el productor de quesos Carlos Henrrique Chaparro, de 47 años, durante protesta en contra de irregularidades en la venta de gasolina en Aragua de Barcelona, estado Anzoátegui.

Sobre el segundo asesinato, el 29 de julio, el Tribunal Séptimo de Control del estado Anzoátegui imputó a seis personas: capitán (GNB) Carlos Alberto Borregales, sargento mayor de tercera (GNB) Luis Romero, sargento mayor de tercera Víctor Meza y al sargento mayor de tercera (GNB) Jorge Leonardo Meneses; y a los civiles Danny Arellán y Juan Rodríguez.

“Desde el OVCS vemos con preocupación esta indefensión a la que están sometidos los venezolanos, pues sus condiciones se deterioran cada día más bajo la indiferencia de las autoridades. Insistimos en que es necesario la adopción de políticas que atiendan las necesidades ciudadanas, pero sobre todo que encamine al país a una nación próspera y de igualdad de oportunidades”, manifiesta el OVCS.

Insiste en la necesidad de adoptar políticas que atiendan las necesidades ciudadanas, pero sobre todo que encamine al país a una nación próspera y de igualdad de oportunidades.