La dirigencia estudiantil de la Universidad de Oriente en San Félix, acompañada de estudiantes, profesores y vecinos, exigió a las autoridades universitarias y gubernamentales la instalación de una mesa técnica para discutir y explorar soluciones a los problemas urgentes de la casa de estudios.
Sostienen que solo eso garantizará un eventual regreso a clases presenciales.
“Es que se habla de un inicio de clases en los próximos meses, pero tenemos aulas sin electricidad, déficit en control de estudios, el salario de los profesores… ¿Cómo les dices que vayan sin un buen salario? El personal obrero… es difícil regresar así”, expresó Franklin Rodríguez, presidente del movimiento Unidad Estudiantil.
Es que se habla de un inicio de clases en los próximos meses, pero tenemos aulas sin electricidad, déficit en control de estudios, el salario de los profesores… ¿Cómo les dices que vayan sin un buen salario? Es difícil regresar así”
Franklin Rodríguez, presidente del movimiento Unidad Estudiantil
Rodríguez reiteró que la dirigencia estudiantil sigue dispuesta a entablar un diálogo con las autoridades para llegar a acuerdos de soluciones para atender las necesidades básicas del campus universitario, pero recalca que hasta el momento no ha habido voluntad política ni respuestas contundentes por parte de las mismas ante la solicitud.
“El llamado es al ministro de Educación Superior, a las autoridades, es su responsabilidad constitucional y no la están cumpliendo, por eso nosotros vamos a seguir haciendo el llamado”, manifestó.
Todos los pronunciamientos de los dirigentes estudiantiles han sido ignorados por las autoridades toda vez que la crisis universitaria se profundiza.
Además, Rodríguez informó que la dirigencia estudiantil tampoco ha obtenido respuestas contundentes por parte de los diputados de la Asamblea Nacional de 2015.
Sin condiciones mínimas
Durante la pandemia, la UDO en todas sus sedes ha sido blanco de ataques reiterados del hampa. De las instalaciones apenas quedan los cimientos.
En la UDO San Félix, la única área que queda con electricidad es el edificio administrativo. Las 36 aulas del campus permanecen sin servicio eléctrico porque durante la cuarentena antisociales desarmaron y se robaron seis de nueve transformadores de corriente.
Aunque a finales de 2020 la dirigencia logró que funcionarios policiales hiciesen patrullaje nocturno. Desde hace dos meses volvieron a quedarse sin protección policial.
El robo de cableados también afectó seriamente el proceso automatizado de inscripciones y reinscripciones en la universidad. El proceso ahora se hace manual y con dificultades.
La única área que queda con electricidad en la UDO San Félix es el edificio administrativo. Robos de transformadores y desarme de equipos mantienen
sin fluido eléctrico 36 aulas del campus.
El déficit presupuestario en el que está sumergida la educación superior del país impide reponer todos los insumos robados y averiados de los campus universitarios.
Por eso, estudiantes de distintas sedes de UDO Bolívar también han exigido al Ministerio de Educación un presupuesto acorde a las necesidades de las casas de estudios. “Es lamentable que hoy el ministro César Trompiz mantenga una desconexión con el sector universitario”, dijo Rodríguez.
El abandono de las infraestructuras de las sedes de la UDO y demás universidades estatales es solo una arista de la profunda crisis que atraviesa el sector educativo superior.
Los ínfimos salarios que devienen los profesores universitarios provocaron la migración de la mayoría de los educadores, y las aulas se quedan cada vez más vacías.
Recientemente, el Ministerio del Trabajo con apoyo de organizaciones sindicales oficialistas firmó una nueva convención colectiva que fijó el salario de los profesores titulares entre nueve y 11 dólares mensuales. Monto que no cubre ni 10% de la canasta alimentaria.
“Sin garantías mínimas de la resolución de nuestros problemas universitarios más urgentes no podemos volver a clases”, concluyó el dirigente.
