La diputada del Consejo Legislativo del estado Bolívar (CLEB), Zaida Vahlis, informó que solicitará a esta institución la interpelación de la actual presidenta de Hidrobolívar, Shelva Blanco, para rendir cuentas sobre el servicio en la entidad.
Adelantó que trabaja en un proyecto de ley de supervisión y garantía del servicio de agua potable en el estado Bolívar, en pro de garantizar el suministro y en óptimas condiciones para el consumo humano.
En un recorrido por diferentes acueductos de Ciudad Bolívar, la legisladora constató las denuncias ciudadanas, no solo por la falta de agua en sus hogares, sino por el mal tratamiento de esta.
En su visita por la instalación de la planta potabilizadora Angostura, ubicada en el casco histórico de Ciudad Bolívar, denunció que allí constató “un olor putrefacto, heces humanas y de animales flotando, animales muertos dentro de los tanques de almacenamiento. No existe vigilancia alguna, ni químicos para el tratamiento de la misma”.
La parlamentaria dedujo que Hidrobolívar estaría cometiendo un hecho gravísimo contra la salud humana, ya que “está rebombeando agua cruda a los hogares de Ciudad Bolívar. Esto es crimen humano lo que se está cometiendo, y es por eso que pediremos la interpelación en el CLEB del presidente de Hidrobolívar y ante este hecho gravísimo, exigimos la clausura de esta planta potabilizadora”.
Inversión milmillonaria en acueducto inoperativo
La también jefa de la fracción parlamentaria de la Unidad Democrática recordó que en la gestión del exgobernador Francisco Rangel Gómez se invirtieron más de 6 millones de dólares en la construcción y compra de válvulas y químicos para el acueducto del oeste, en la parroquia La Sabanita. Sin embargo, actualmente no funciona.
Informó que el acueducto beneficiaría a los habitantes de las parroquias La Sabanita, Agua Salada y José Antonio Páez.
“Vemos que más del 80% de esta zona está sin una gota de agua, lo que obliga a que los habitantes tengan que buscar agua debajo de las piedras, provocando foco de enfermedades gastrointestinales ante la falta de medidas de higiene y prevención”, advirtió.
Sobre el Acueducto Oeste, Vahlis mencionó que “fue la obra más grande de toda Latinoamérica y la cantidad de recursos aprobados para la compra de 42 válvulas, pareciera que el elefante de la corrupción se esconde aquí”.
En la comunidad aseguraron a Vahlis y su homólogo Arcadio Guzmán, que el gobierno celebró con bombos y platillos esta obra que a los días dejó de funcionar.
En el tanque C del Acueducto Vista Hermosa, que surte y alimenta a diferentes sectores de Vista Hermosa, no hay bombas para el rebombeo de agua y hay poca capacidad debido que solo se encuentra una bomba en las instalaciones. El resto sufrió averías por fallas en el servicio eléctrico.
Milagros Serrano y Pedro Ayendez, habitantes de este sector, dijeron que la zona centro y sus alrededores tienen más de 20 días sin agua, así como de gas y aseo urbano.