Un panel de tres jueces del tribunal de Manhattan, en Nueva York, ordenó a la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) pagar una deuda de 348 millones de dólares, pese a que la empresa venezolana se negó a cumplir con este compromiso alegando que era imposible debido a las sanciones aplicadas por Washington, reportó Bloomberg.
Los jueces confirmaron fallos de un tribunal inferior que ordenaban a Pdvsa pagar un conjunto de pagarés emitidos por la estatal. El fallo beneficia a Dresser-Rand Co -unidad de la energética Siemens AG- y Contrarian Capital Management, ambas tenedores de la deuda.
Pdvsa había intentado alegar que era imposible pagar la deuda ante las restricciones operativas que suponen las sanciones contra la industria petrolera, por lo que reducen los ingresos, especialmente debido a la prohibición total de transacciones financieras en Estados Unidos.
Mientras se siguen acumulando los fallos en contra de Pdvsa, la estatal se prepara para la subasta de Citgo Petroleum Corp, filial de Pdvsa en Estados Unidos, ordenada por un tribunal estadounidense para cumplir con las demandas de los acreedores de Pdvsa, ante el impago de decenas de deudas que contrae la compañía venezolana.
Al menos 20 compañías, entre las cuales figuran las energéticas estadounidenses ExxonMobil y ConocoPhillips, solicitaron registrarse en la subasta que se extenderá a lo largo de un año.
El pasado mes de marzo, juez federal de distrito, Leonard Stark, dio luz verde al inicio del proceso de venta de Citgo incluso pese a la protección que ofrece la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que restringe cualquier transacción relacionada con las acciones que PDV Holding tiene en Citgo.
Según el juez del Tribunal de Distrito en Delaware, la protección de la OFAC no impide que se puedan tomar “medidas preliminares” sobre la oferta de participación accionaria de PDV Holding.
Algunos de los acreedores de Venezuela acusan a Pdvsa y a la matriz de Citgo de intentar “retrasar o arruinar” la subasta por la pérdida de los certificados bursátiles oficiales de la matriz.