El presidente de Primero Justicia en Bolívar, Rachid Yasbek, fijó posición en relación con la renuncia del dirigente nacional Henrique Capriles Radonski, decisión que su propio partido rechazó.
La directiva regional de Primero Justicia “exige una unidad total. Pueden haber puntos de vista distintos, pero hoy Venezuela nos exige que haya una unidad mucho mayor y, sobre todo, dentro de Primero Justicia porque ha demostrado durante estos 24 años de su fundación ser combativos”, expresó Yasbek.
Recordó los retos y ataques que han tenido que enfrentar dentro y fuera del poder legislativo, donde han ocupado espacios, así como en otros cargos de elección popular, lo que los ha llevado a hoy tener presos políticos y exiliados, además del caso de Fernando Albán, muerto bajo custodia del Sebin.
“Hoy lo que se le puede exigir a la dirección nacional del partido es que haya mucha más comunicación y mucha más unificación de criterio. No es fácil, sobre todo cuando tienes un partido con ese liderazgo tan reconocido a nivel nacional e internacional. Pero una cosa es la discusión interna y otra cosa es ventilarlo públicamente. Nosotros, desde Primero Justicia Bolívar lo que exigimos es que se mantenga este gran partido que nos ha costado a muchos, desde las bases hasta las direcciones municipales, regionales y nacionales. Hay que moderar los tonos y hay que seguir en el trabajo de lograr el cambio”, reiteró.
Para Yasbek, lo que se logró en Venezuela el 28 de julio tuvo un importante aporte por Primero Justicia, al seguir trabajando en la primaria con testigos y movilizadores, aun cuando su candidato Henrique Capriles se retiró de la contienda.
Fortalecer al partido
A pesar de los desafíos, Yasbek sostuvo que se busca fortalecer la organización y continuar el trabajo hacia el cambio y la lucha por los intereses de los ciudadanos.
En su carta de renuncia, Capriles esbozó “falta de unidad interna”, “diferencias irreconciliables” y “falta de transparencia y rendición de cuentas de los administradores”, como parte de sus motivos para dejar el partido.
Alegó que estos factores “lo único que hacen es debilitar al partido, hacerle sentir a la militancia el extravío del mismo y, por tanto, cada día aumentar la desconexión con el sentimiento y los anhelos de cambio de los venezolanos”.
También señaló al exdiputado Julio Borges de exponer a “bajezas” a otros militantes de la tolda y priorizar sus intereses particulares.
“Hemos caído, lamentablemente, en una práctica en la que un pequeño cogollo en unos cargos quiera imponer sus intereses, intereses que, además, no son claros con la razón de ser de esta organización política. Ya es costumbre que el mensaje que se transmite en nombre del partido no responde a los valores colectivos, sino a la ‘agenda’ de una suerte de caudillo, quien, con sus colaboradores, se cree amo y señor”, expresó en su carta.
En respuesta, la directiva nacional de Primero Justicia rechazó su renuncia y anunció que crearán un grupo de trabajo con el objetivo de estudiar los elementos que Capriles describió en su carta.