Ronald Dugarte, exfuncionario de la Dirección General de Contrainteligencia Militar, aseguró que en la sede del organismo de seguridad, en Boleíta, se comenten actos de torturas en contra de los presos políticos.
“Durante mi permanencia en la Dgcim cumplí varios cargos, uno de ellos, el más importante, fue desempeñar servicios en la División de Investigaciones como custodio, mejor conocida como el Calabozo, donde permanecen los presos políticos”, dijo Dugarte.
El exagente señaló que en los calabozos se ejecutan atrocidades inhumanas. “Hay prisioneros durmiendo en el piso, haciendo necesidades en una botella; prisioneros a los que no se les brinda de manera inmediata el servicio médico y otros que son torturados”, indicó.
El funcionario, que denunció los delitos cometidos en las celdas del organismo durante la presentación del nuevo informe sobre crímenes de lesa humanidad ante la Organización de los Estados Americanos, señaló que los servicios de inteligencia cubana realizan misiones mixtas en Venezuela.
Afirmó que escuchó gritos de dolor de los apresados. Resaltó que a los presos les colocaban las manos hacia atrás y con una carpeta o capucha les apretaban la cabeza con cinta adhesiva.
“Tengo conocimiento de diferentes centros de torturas dentro de las unidades militares ubicadas en Fuerte Tiuna y en lugares clandestinos, de los cuales solo conocen su ubicación el personal de la milicia cubana y los colectivos, que son paramilitares”, afirmó Dugarte.
El exfuncionario del cuerpo de inteligencia informó que el general Miguel Rodríguez Torres se encuentra en condiciones graves de salud, tanto físicas como mentales.
“La condición del general Rodríguez Torres es desfavorable, está muy grave. Suele ser atendido semanalmente por fisioterapeutas porque fue operado del hombro izquierdo”, indicó durante la sesión de presentación del nuevo informe.
Señaló que a pesar de la atención que recibe, las circunstancias en las que se encuentra su celda no permiten que su condición médica evolucione.
Todo registrado
También mostró videos en los que se observan las condiciones en las que se encuentran el coronel Jhonny Mejías Laya y el excapitán Juan Caguaripano en las instalaciones de la Dgcim. Aseguró que Mejías Laya estuvo 30 días atado de manos y con los ojos vendados, mientras que Caguaripano tiene graves problemas de salud y se niega a comer hasta ser atendido.
Tamara Suju, abogada defensora de derechos humanos, entregó este miércoles un nuevo informe sobre los crímenes de lesa humanidad cometidos por los agentes del oficialismo a Luis Almagro, secretario general de la OEA.
Indicó que el número de casos de torturas realizadas a menores de edad, civiles y militares aumentó en los últimos dos meses.
“La tortura no ha cesado, al contrario, se ha incrementado por el desespero de Maduro al sentir que pierde el control”, señaló Suju por Twitter. “El Instituto Casla registró en los últimos 2 meses al menos 40 casos nuevos de torturas que incluyen a menores de edad de ambos sexos, civiles y armados”, denunció Suju.
La jurista agregó que estas acciones fueron más severas con los funcionarios de seguridad nacional. “Han sido golpeados, atados de pies y manos, colgados e incluso encapuchados y tirados en el piso sin recibir ni alimentos ni agua durante días”, relató. (Tomado de El Nacional)