La opacidad se mantiene en el inicio de un nuevo período para la Cámara Municipal de Caroní. En la incorporación de los nuevos concejales, que incluye dos curules para los electos por la tarjeta de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), se consiguieron con un presupuesto previamente aprobado por la gestión que les antecedió.
Hasta ahora, desconocen de cuánto es el presupuesto y para qué está previsto destinar las partidas presupuestarias.
Para Aliana Estrada, concejal por la bancada del G4, lo principal es conocer el presupuesto aprobado por los concejales que entregaron gestión, ejecutar lo ya asignado y fiscalizar que lo que esté allí se cumpla, en especial lo que tiene que ver con protección de servicios públicos y mejor calidad de vida a los ciudadanos.
Otro punto que destaca la edil es la protección a los trabajadores que hacen vida en el Palacio Municipal.
“Lo que nos advirtieron en los pasillos es que los anteriores concejales ni siquiera sesionaban. También hay una nueva ordenanza referente a los mercados municipales, todo eso hay que revisarlo. En la última sesión nadie sabía sobre el presupuesto aprobado, eso te dice sobre la falta de transparencia, tampoco hay un procedimiento para la atención a los concejales”, agregó Estrada.
“Somos una función contralora. Vamos a trabajar en conjunto, pero lo importante es que se cumpla con el trabajo y fiscalizar que el alcalde cumpla con sus funciones”, reiteró.
Por lo pronto activarán asambleas ciudadanas para enfocarse en sus necesidades, y presionar para incluirlas en las prioridades de la Cámara.