Sin temor a la intimidación por parte del Gobierno venezolano, los guayaneses atendieron el llamado a la protesta masiva nacional e internacional convocada por María Corina Machado para este domingo 1 de diciembre, con la intención de impulsar un movimiento que prepare al país “para la transición hacia la libertad, previo al 10 de enero, día pautado para la toma de posesión de un nuevo gobierno nacional en manos de la democracia”.
Así lo ratificó el diputado Rachid Yasbek, secretario ejecutivo de la Plataforma Unitaria Democrática en el estado, quien señaló que en aras de esta gran protesta mundial en varios puntos de Bolívar se cumplió con el llamado.
“Hemos arrancado con este primer día de adviento diciendo ya basta de las persecuciones políticas, ya basta de los presos políticos, ya basta de tanta hambre y estamos preparándonos para lo que ha manifestado el pueblo de Venezuela, el 28 de julio pasado, cuando a través del voto ciudadano exigió ese cambio necesario. También queremos llegar a los corazones de todos aquellos que pudieran tener decisiones en sus manos para que escuchen el clamor nacional”, afirmó el vocero de la oposición.
Expresó además que se habla mucho de creer en Dios, de creer en Cristo, de ser cristiano. Pues como cristiano -destacó- “lo primero que debemos hacer es creer en nuestros mandamientos, y eso es lo que queremos nosotros en esta protesta pacífica, democrática, social y de integración, que comencemos a prepararnos para lo que nos viene el próximo enero.
Bajo el signo del terror y amedrentamiento
En los espacios de la catedral de Ciudad Guayana, frente a la Cruz del Papa, una caravana de motorizados con funcionarios de la Gobernación de Bolívar y del Sebin intentó intimidar a los asistentes con la toma de fotografías y manteniéndose en el sitio hasta culminar la actividad.
“En este momento no puede haber matices en la lucha. No puede haber grises, eres rojo o eres azul. En este momento nosotros estamos abrazando la luz de la libertad, la luz de la esperanza, la luz blanca que viene de nuestro Padre el Señor Jesucristo. Por eso en este momento, en el día de hoy, esta irreverencia que estamos haciendo contra este régimen es para pedir por la libertad de nuestros presos políticos en el estado Bolívar”, expresó Antonio Cheremo, secretario general de Proyecto Venezuela en Bolívar.
El dirigente sindical Rubén González, quien participó en la protesta, sostuvo que lo que reclaman es un “proceso libertario que está en las bases constitucionales”.
“El 28 de julio, ese pueblo soberano, aún en medio de la persecución, chantaje, terrorismo, con mucha valentía salió a votar y decidió que Edmundo González es el presidente de la República de Venezuela. Por eso, hoy estamos aquí a un llamado que hizo María Corina Machado, para que sigamos levantando nuestras voces”, manifestó González.
Asimismo rechazó las acusaciones de instigación al odio hechas por el gobierno contra quienes manifiestan pacíficamente.
“Este soberano que está en este momento, en este lugar, lo único que está buscando es que se reconozca y se respete la voluntad popular y que, de una u otra forma, el 10 de enero de 2025 vamos a tomar posesión, porque conforme a la Constitución se vence este proceso y tenemos allí que juramentar el nuevo presidente de la República Bolivariana de Venezuela, que es Edmundo González Urrutia”, reafirmó.
La diputada del Consejo Legislativo del estado Bolívar (CLEB), Zaida Vahlis, reiteró que la concentración de este 1 de diciembre responde a “una lucha del bien contra el mal. Por eso estamos alrededor de las iglesias haciendo protesta pacífica y un reclamo por nuestros presos políticos, que inclusive dentro de estos privados de libertad hay militares y muchos jóvenes menores de edad”.
“Figúrense ustedes la dificultad, la agonía y el clamor de los familiares en torno a todos estos presos políticos. Por eso exigimos libertad ya. Que se restablezca la democracia y se respete la soberanía popular pronunciada el 28 de julio de este año”, agregó Vahlis.
La persecución y represalias en el contexto de las manifestaciones postelectorales, se reflejan en el temor de la sociedad civil a asistir a convocatorias de calle, aun cuando son llamados a manifestaciones pacíficas.
Aunque recientemente se dieron excarcelaciones de jóvenes detenidos desde el 29 de julio, aún permanecen privadas de libertad más de mil personas, incluidos trabajadores de la prensa.
Según lo expresado por María Corina Machado ante los medios internacionales, el gobierno bolivariano atraviesa un proceso de fractura interna, marcado por contradicciones, tensiones y divisiones reales.