El Gobierno español suspendió de forma definitiva el canje de permisos de conducir que estaba vigente con Venezuela desde 2005. La decisión se tomó tras no solventarse los problemas que habían surgido en los últimos años a la hora de implementar la aplicación del Canje de Cartas constitutivo del acuerdo sobre el reconocimiento recíproco.
El acuerdo tenía rango de tratado internacional, explicó Moncloa. El Gobierno español recordó que en agosto de 2017 comenzaron los problemas en la aplicación del acuerdo, luego de que las autoridades venezolanas empezaran a expedir un nuevo modelo de permiso de conducción en formato PDF, en sustitución del tradicional permiso en forma de tarjeta plástica, que podía ser descargado e impreso por su titular cuantas veces lo deseara.
La inseguridad jurídica, que según el gobierno de la nación europea se produjo a partir del cambio en las autoridades venezolanas, se propuso a Caracas en una nota verbal, a instancias de la Dirección General de Tráfico (DGT) la suspensión del Canje de Cartas.
También se propuso negociar una enmienda para establecer una prueba de control de conocimientos, una exigencia regular para los solicitantes de canje de las categorías de los permisos de conducción españoles del grupo 1.
Ahora, “una vez agotada la vía diplomática al no haber obtenido resultado alguno hasta la fecha”, en el Ministerio de Exteriores las unidades competentes en lo relativo a la relación con Venezuela “confirmaron la conveniencia de solicitar la aprobación de dicha suspensión”, que finalmente se ha producido el martes, señaló Moncloa.
En realidad, ya desde principios de 2021 la DGT había comenzado a no proceder al canje de los permisos de conducir venezolanos y en los últimos años se han producido cientos de detenciones de personas con carnés falsos expedidos en Venezuela y que se pretendía canjear en España.
