El miércoles 22 de julio la Fiscalía de Colombia ocupó siete bienes del empresario Alex Saab, quien se encuentra detenido en Cabo Verde desde el 12 de junio por una orden de Interpol en su contra, luego de una solicitud de Estados Unidos que lo acusa de presunto blanqueo de dinero, con empresas domiciliadas en varios países, con el régimen de Nicolás Maduro.
De acuerdo a lo señalado por la Fiscalía de ese país, los bienes ocupados están valorados en más es 35 mil millones de pesos colombianos, es decir, un poco más de 9.646.680 dólares. Estos habrían sido adquiridos por una empresa fachada con recursos procedentes de actividades ilegales, informó la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio de ese país.
Entre los bienes ocupados se encuentran una mansión de 3.740 metros cuadrados, dos casas, un apartamento y tres garajes, ubicados en Barranquilla.
La justicia de la nación neogranadina apuntó que la ocupación de los bienes corresponde a las medidas cautelares de embargo, secuestro y suspensión de poder dispositivo anunciadas el pasado 9 de junio por funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación y Malversación de Fondos por los gobiernos de Colombia y Estados Unidos.
La Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio precisó que los bienes quedarán a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) para su administración.
Este 22 de julio Alejandro Correa Ortega, embajador de Venezuela en Cabo Verde, denunció que se le negó el acceso a la celda de Alex Saab. El funcionario venezolano señaló que su equipo legal ha tenido acceso restringido a Saab en los últimos días.
Tras la denuncia, el exjuez Baltasar Garzón dijo que coordinará la defensa de Saab y que además alegará que se le han vulnerado sus derechos, especialmente el de la defensa.
Aunque Baltasar Garzón no ha dado declaraciones, porque se recupera del COVID-19, a través de un comunicado su firma señaló que “existen claros indicios de que se están vulnerando derechos fundamentales por parte del Gobierno estadounidense”, reseñó El Tiempo.
En el texto se aseguró que muchas de las acciones en Estados Unidos están condicionadas por intereses políticos y diplomáticos del Ejecutivo, motivo por el cual se están instrumentalizando para presionar a Venezuela en el plano político internacional.
Para Baltasar Garzón, el colombiano, acusado de corrupción, se ha visto perjudicado por una serie de irregularidades, “tales como una clara falta de proporcionalidad en la acusación, la falta del derecho al debido proceso y las garantías procesales, en caso de ser extraditado”.
Asimismo, advirtió a través de un comunicado emitido por su firma, que la supuesta prohibición de visitas se trata de “una violación al derecho que tiene toda persona privada de libertad en un país extranjero a ser visitado y asistido por la autoridad consular que le representa”.
Advirtió que Saab estaría expuesto a sufrir una situación de tortura, trato cruel, inhumano o degradante, fruto de ser sometido a un proceso penal eminentemente político.