El exmandatario de Perú, Alberto Fujimori, falleció este miércoles a los 86 años en Lima tras varias complicaciones de salud asociadas al cáncer de lengua que padecía desde hace algún tiempo, anunció en la red social X su hija y dirigente política Keiko Fujimori.
Fujimori, quien gobernó Perú desde 1990 hasta el 2000, abandonó en diciembre pasado la cárcel de Lima en la que cumplía una condena de 25 años por delitos de lesa humanidad, luego de que el Tribunal Constitucional (TC) restituyera el indulto humanitario que le otorgó en 2017 el entonces gobernante Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018).
“Después de una larga batalla contra el cáncer, nuestro padre, Alberto Fujimori acaba de partir al encuentro del Señor. Pedimos a quienes lo apreciaron nos acompañen con una oración por el eterno descanso de su alma. Gracias por tanto papá!”, escribió Keiko en X.
Este miércoles, su médico personal y congresista Alejandro Aguinaga, tras visitarlo en su domicilio aseguraba que estaba luchando “vista la situación actual y como consecuencia de las informaciones (que circulan acerca de su salud) pedimos que se restrinjan las visitas y reiteramos nuestro agradecimiento (por el interés en Fujimori)”, dijo a los periodistas apostados en la puerta del domicilio, informó la agencia EFE.
El exmandatario peruano fue visto la semana pasada abandonando una clínica limeña tras recibir atención médica. En julio pasado había sido operado de la cadera, una semana después de ingresar en cuidados intensivos por sufrir una caída en su domicilio.
Fujimori, el autócrata
Alberto Fujimori era hijo de inmigrantes japoneses, fue ingeniero agrónomo y rector universitario antes de entrar en política con el partido Cambio 90, con el que ganó las elecciones presidenciales en 1990.
En 1992, Fujimori dio un autogolpe que disolvió o intervino todos los demás poderes del Estado, y asumió poderes extraordinarios. Tras el golpe se reveló que su gobierno aplicaba las directrices del castrense Plan Verde, un proyecto vinculado a esterilizaciones forzosas. Otra de las banderas de su gestión fue la represión violenta de la insurgencia de Sendero Luminoso.
Resultó reelegido en 1995 y, de forma controvertida, nuevamente en 2000, en medio de acusaciones de fraude electoral, último período al que renunció, luego enjuiciado por varias causas y condenado a 25 años de prisión.
A pesar de las denuncias de violaciones de derechos humanos y la condena por crímenes de lesa humanidad muchos peruanos consideran favorable su periodo de gobierno debido a la percepción del restablecimiento de la estabilidad política y el crecimiento económico en su país.
El pasado 14 de julio, Keiko Fujimori anunciaba que su padre volvería a la arena política y se postularía nuevamente a la presidencia de Perú.
