La cifra de muertos a causa de las fuertes inundaciones registradas en el municipio montañoso Petrópolis, en el sur de Brasil, aumentó a 104 tras el paso de una tormenta que se saldó por ahora con 35 desaparecidos.
El Departamento de Defensa Civil del estado de Río de Janeiro informó que del total de víctimas mortales, al menos 8 son menores de edad. Además 24 personas fueron rescatadas con vida durante las últimas jornadas.
El gobernador de Río de Janeiro, Cláudio Castro, lamentó que se trata de la “peor lluvia desde 1932”. “Han sido 240 milímetros en 2 horas. Fue una lluvia sumamente extraordinaria”, dijo.
Tragedia histórica
Según indicó en rueda de prensa, la tormenta reúne los componentes de una “tragedia histórica” y un “déficit” a diferentes niveles. La zona de Petrópolis ha sufrido graves inundaciones a lo largo de la historia, si bien ahora las autoridades de Brasil califican la situación de parecida a una guerra.
Las autoridades locales decretaron el estado de calamidad pública. El agua arrasó amplias zonas del municipio, con infraestructuras y viviendas sepultadas por el lodo.
Se estima que unas 54 casas quedaron totalmente destruidas por las lluvias, lo que llevó a cerca de 400 personas a desplazarse en busca de albergues y refugios, según informaciones de la cadena G1. Unos 400 bomberos trabajan en las labores de búsqueda de los desaparecidos.
Consuelo a los familiares
El presidente de Brasil Jair Bolsonaro, quien se encuentra de viaje diplomático en Rusia, mostró su apoyo a las víctimas a través de Twitter. Prometió que a pesar de estar lejos, él y su gobierno siguen “comprometidos con ayudar a los demás”. “Dios consuele a las familias de las víctimas”.
El diario Estadao publicó que, según una nota recibida de la Secretaría de Estado de la Policía Militar de Río de Janeiro, en algunas zonas comerciales de Petrópolis se registraron intentos de allanamiento y posible robos en establecimientos afectados por las lluvias.