Trabajadores de la empresa Suramericana de Aleaciones (Sural) denunciaron que, hasta la fecha, la Inspectoría del Trabajo Alfredo Maneiro ha ordenado 35 órdenes de reenganche para personal fuera de planta, las cuales no han sido acatadas por la compañía.
Asimismo ha transcurrido un mes desde que el gobernador Ángel Marcano se comprometió a elevar el reclamo del personal ante el Ministerio del Trabajo, para dar respuesta a la problemática de los trabajadores. Los suralistas llevan 7 años fuera de sus puestos laborales debido a un cierre técnico por falta de materia prima. El mandatario regional se reunió con los afectados el 13 de junio y prometió que esa misma semana elevaría el reclamo ante el Ministerio del Trabajo para reactivar estas empresas; sin embargo, hasta ahora no ha habido respuesta.
“Después de reunirnos con el gobernador, él se comprometió que tendríamos una respuesta completa y positiva para los trabajadores. Hasta el día de hoy, estamos esperando. Hace una semana fuimos a Caracas y estuvimos en la Presidencia de la República, introducimos una solicitud al presidente para la aplicación del artículo 149 que no es más que una alianza que presentan los trabajadores al Gobierno nacional para sacar a la empresa adelante. Fuimos también a Vicepresidencia y también al despacho del Ministerio del Trabajo. Como ellos están en campaña, creemos que el pronunciamiento sobre esto será la semana posterior a las elecciones. Los reenganches siguen saliendo y nosotros también vamos a solicitar a la inspectora que se pronuncie en relación a los reenganches”, manifestó Winder González, secretario de organización del sindicato de Sural.
En contexto, Sural es una compañía encargada de la fabricación de conductores de aluminio y productos derivados de este material, la empresa dependía de la materia prima de CVG Venalum, estatal que empezó a recortarles el suministro de aluminio debido a la crisis eléctrica, provocando que la compañía paralizara sus actividades en 2018. Tras 5 años de paralización, en 2023 los trabajadores confirmaron actividad en la planta; sin embargo, han venido denunciando que, a pesar de algunas mejoras y un posible arranque, los propietarios de la compañía no han conversado con el personal que fue enviado a sus casas desde el cierre y pretende ejecutar un despido masivo, vulnerando la inamovilidad laboral y el pago de beneficios contractuales.
Trabajadores exigen el control de la planta
Ante la ineficacia por parte de las autoridades laborales y regionales para dar respuesta a este caso, que mantiene en incertidumbre alrededor de 390 empleados, los afectados prepararon una documentación en la cual exponen un plan de recuperación para la compañía.
“Planteamos un proyecto de recuperación productiva y económica que presentaremos a través de la diputada Ilenia Medina al Presidente de la República. Es la encargada de presentar este proyecto de manera directa. Nosotros presentamos ante la opinión pública este plan de desarrollo que es una reseña histórica, la productividad de Sural, sus ventajas y desventajas; las áreas a las que hay que invertirle… Los trabajadores están en posición de no solo producir, sino de administrar esa empresa”, expresó González.
En este sentido se apegan al artículo 149 de la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras, donde se expone: “En los casos de cierre ilegal, fraudulento de una entidad de trabajo, o debido a una acción de paro patronal, si el patrono o patrona se niega a cumplir con la providencia administrativa que ordena el reinicio de las actividades productivas, el ministro o ministra del poder popular con competencia en materia de trabajo y seguridad social podrá, a solicitud de los trabajadores y de las trabajadoras, y mediante resolución motivada, ordenar la ocupación de la entidad de trabajo cerrada y el reinicio de las actividades productivas, en protección del proceso social de trabajo, de los trabajadores, las trabajadoras y sus familias. A tal efecto, convocará al patrono o patrona, trabajadores, trabajadoras y sus organizaciones sociales, para la instalación de una junta administradora especial, que tendrá las facultades y atribuciones necesarias para garantizar el funcionamiento de la entidad de trabajo y la preservación de los puestos de trabajo”.
En este proyecto plantean que los propietarios de la empresa están en una quiebra financiera que se niegan a aceptar, esto a pesar de que reconocen que se han venido haciendo trabajos de recuperación en la planta. Asimismo afirman que ya “no cuentan con la mafia del aluminio que pueda garantizarle ganancias exorbitantes gracias a la compra de miles de toneladas de aluminio a muy bajo precio. En consecuencia, no hay posibilidad alguna de que puedan arrancar dicha empresa”, señalan.
Ante esto, los empleados proponen que se aplique el artículo 149 para salvaguardar sus puestos laborales y tomar un “papel protagónico en la recuperación de la empresa”.
Como segundo paso, se deberá entablar asociaciones estratégicas con países Brics, Pdvsa y Venalum para obtener tecnologías, suministro estable de gas para hornos de función y materia prima respectivamente. De la estatal del aluminio requerirían una dotación de mil toneladas de aluminio mensual.
Como última fase se requeriría un mantenimiento general de todas las áreas de la empresa: líneas de producción de alambrón, recuperación de hornos de fundición, tren de laminación y sistema de embobinadores de alambrón. Así como la recuperación de grúas de 5 y 20 toneladas, torres de enfriamiento, rueda de colada y línea de producción de conductores eléctricos.
En su haber, la compañía cuenta con dos líneas de producción de alambrón con 8 hornos de fundición de aluminio, 4 hornos de mantenimiento de aluminio, trenes de laminación de alambrón, embobinadores de alambrón, grúas y ruedas de colada.
¿Qué se lograría con la reactivación de Sural?
Según el planteamiento de los trabajadores, la reactivación de Sural sería beneficiosa para todo el personal, así como para la economía nacional. Exponen que la producción de conductores eléctricos incrementa el valor del aluminio primario entre 120% y 180%.
Aseguran que procesar mil toneladas de conductores por mes, sería una actividad rentable que permitiría obtener ganancias. A su vez plantean que los tendidos de líneas de distribución y transmisión de energía en el país han sobrepasado su vida útil, por lo que es urgente iniciar un proceso de sustitución de conductores eléctricos en todo el país.
Por último afirman que ante la posibilidad de desarrollar el territorio de la Guayana Esequiba, se necesitaría la creación de tendidos de líneas de alta y baja tensión para alimentar esta región, trabajo que podría desempeñarse con apoyo de esta compañía.