Trabajadores del Complejo Siderúrgico Planta Casima denunciaron amedrentamientos y despidos injustificados por parte de la directiva de la empresa; los obreros aseguraron que aquellos empleados que llevaban la vocería en los encuentros que estaban manteniendo con autoridades de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) fueron despedidos injustificadamente.
Desde noviembre de 2022 los trabajadores de Planta Casima mantienen los reclamos protestando y, en diciembre del mismo año en medio de una paralización de la planta por fallas durante 3 días, exigieron el pago de beneficios como prestaciones sociales y horas extras.
Durante esta manifestación, los voceros de los trabajadores Freddy Acosta, Nelson Echandía y Junior Capriata, se reunieron con autoridades de la CVG para dialogar sobre la problemática; sin embargo, el grupo fue amenazado y la protesta disipada con funcionarios de la Guardia Nacional. Recientemente, según trabajadores de la empresa, los tres dirigentes fueron despedidos de forma injustificada.
“Queremos que paren los despidos injustificados. Tenemos derecho a la protesta y nos quieren silenciar a todos. Trabajamos con las uñas y hacemos un gran esfuerzo por sacar la producción”, alegó uno de los obreros de la estatal.
Según los denunciantes, los voceros permanecen bajo medida cautelar de despido y tienen prohibido hacer declaraciones a la prensa, aun así, el grupo clama por el respeto al derecho a huelga y el cese de los despidos arbitrarios.
Fuentes cercanas a los trabajadores que permanecen bajo medida cautelar, aseguraron que el Ministerio del Trabajo entregó órdenes de separación del cargo a los empleados que participaron en las protestas durante el mes de diciembre.
“Se está responsabilizando a los obreros de la empresa de las paralizaciones del mes de diciembre”.
Este 7 de febrero, los afectados asistieron a la Inspectoría del Trabajo Alfredo Maneiro para consultar qué medidas pueden tomar para revocar los despidos injustificados.
No obstante, durante 2022, trabajadores de Ferrominera Orinoco, la Siderúrgica del Orinoco, Venalum y Alcasa introdujeron más de 15 denuncias a este mismo órgano y, hasta la fecha, no ha habido ninguna respuesta.