Trabajadores de la empresa Fomento de Servicios Públicos Compañía Anónima (Fospuca) se concentraron en la sede de la recolectora de desechos para exigir el cumplimiento de los acuerdos de pago establecidos y la entrega de dotación de uniformes.
Los llamados “soldaditos verdes” de la empresa presidida por el empresario José Simón Elarba, que conforman una masa laboral de 1.200 obreros, denunciaron a Correo del Caroní que tras concluir su primer mes de trabajo, la compañía les pagó un monto menor al salario acordado en su contrato, a lo que se suma problemas de transporte y falta de uniformes.
Según los trabajadores, su contrato establece un salario de 75 bolívares semanales para un ingreso mensual de 300 bolívares, es decir, 20 dólares.
Sin embargo, este 15 de diciembre la mayoría de los empleados se presentaron en la sede de la compañía con listín de pago en mano, reclamando que se les depositaron montos que van desde los 40 a 60 bolívares, lo que representa una reducción de, al menos, 15% del sueldo prometido.
Nosotros llegamos a las 6:00 de la mañana. Incluso antes. Estamos acá y los transportes salen a llevarnos a nuestras casas a las 7:30-8:00 de la noche. ¿Cómo descansamos?” |
“Estamos protestando porque hubo gente que cobró hasta 13 bolívares. Nos prometieron un bono de 20 dólares y no nos han cumplido. Nos falta rial. Cada semana nos mochan más dinero. Si ellos les cobran a los locales en dólares, ¿por qué no nos ajustan a nosotros los salarios al dólar? Si el dólar aumenta, que nos paguen en base a eso porque ellos cobran tarifas en dólares. Al Rosa Bela le llega una factura de 2.500 dólares y a nosotros nos pagan muy poquito”, expresó uno de los afectados.
Estas declaraciones hacen referencia a la dolarización de facto que se ha instaurado en el país desde 2021. En este sentido, las tarifas del servicio de recolección de desechos están fijadas en dólares, sin embargo, los trabajadores tienen contratos en los que el salario se expresa en bolívares y no fluctúa pese a las alzas del precio de la divisa.
Esta situación fue admitida por José Simón Elarba, propietario de la empresa, quien reconoció que debido a la fluctuación del dólar el monto ofrecido en las negociaciones, que está fijado en bolívares, ahora representa un monto menor al cambio de la moneda estadounidense, por ende, ha perdido poder adquisitivo.
En este orden de ideas, los afectados aducen que cuando iniciaron operaciones en noviembre, el salario negociado era de 30 dólares mensuales, pero los 300 bolívares que se pactaron en sus contratos a la fecha de hoy equivalen solo a 20 dólares.
Esto contrasta con una serie de declaraciones ofrecidas por Elarba para Correo del Caroní, quien aseveró que el monto ofrecido cuando se hizo la negociación equivalía a 100 dólares, versión que difiere de la ofrecida por los trabajadores.
Asimismo, Elarba se jactó de entregar una bonificación de 20 dólares en efectivo a todos sus empleados a fin de mes, sin embargo, los mismos declararon que esta bonificación ha ido siendo aplazada y, hasta la fecha, no la han recibido.
Transporte y dotación de uniformes
Según los obreros, la compañía cuenta con una sola unidad de transporte lo que implica que pese a terminar sus trabajos a las 4:00 de la tarde, muchas veces llegan a sus casas a las 7:00 de la noche.
“Nosotros llegamos a las 6:00 de la mañana. Incluso antes. Estamos acá y los transportes salen a llevarnos a nuestras casas a las 7:30-8:00 de la noche. ¿Cómo descansamos?”, destacó uno de los protestantes, quien aseguró que el día 14 de diciembre el transporte no pasó y debió pagar pasaje de ida y vuelta.
Sindicato patronal
En los listines de pago se refleja el descuento por concepto de cuota sindical, para el Sindicato Bolívar de Trabajadores de Fospuca (Sinbotrafospuca), cuota gremial establecida en la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras.
No obstante, los obreros manifestaron que no votaron por ese sindicato, al cual calificaron de patronal porque fue impuesto por la gerencia.
“Queremos un sindicato de Guayana que nos apoye a nosotros. Es gente de Caracas comprada. Exigimos un sindicato que nos apoye, esos tipos son de la misma empresa”, aseveró uno de los perjudicados.