Como es costumbre desde hace más de tres años, durante su mensaje anual Nicolás Maduro prometió “recuperar el ingreso de los trabajadores”. Esta recuperación se refiere a un aumento en el “ingreso mínimo nacional”, estancado en 130 bolívares desde hace casi tres años.
Sin aclarar fechas y referirse únicamente a fortalecer la indexación (pagar tomando como referencia el precio del dólar), el mandatario aseguró que este año continuarán trabajando para mejorar los ingresos de los trabajadores, cuyo sueldo actual es de menos de 4 dólares, acompañado de bonificaciones sin incidencia en beneficios laborales.
“Durante más de cuatro años hemos venido consecuentemente escuchando el mismo accionar en cuanto a los derechos de los trabajadores referente al aumento salarial. El aumento salarial está en base a unas convenciones colectivas en esta zona de la CVG y empresas básicas (…) El salario debe ser conforme a la Constitución y lo establecido, debe ser suficiente y alcanzar a la canasta básica. En ese sentido, este salario al cual se refiere Nicolás Maduro existe solamente en su mente. Es algo para crear expectativa y seguir avanzando en eliminar el movimiento sindical y las convenciones colectivas. En consecuencia, ese hecho progresivo que tienen las convenciones colectivas se quede fijado en un solo monto y violando los derechos establecidos en la Ley del Trabajo, los reglamentos… El Ejecutivo y el patrono está obligado a cumplir con lo establecido en la Constitución”, expresó Ramón Espino, dirigente sindical de CVG Carbonorca.
El ingreso mínimo, que no está contemplado en la Constitución ni leyes de trabajo, representa el pago mínimo que debe recibir un trabajador y está compuesto por una pequeña fracción salarial, el bono de guerra económica de 90 dólares y el bono de alimentación correspondiente a 40 dólares.
Según el artículo 91 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, los trabajadores tienen derecho a un salario que les permita cubrir sus necesidades básicas. Sin embargo, el salario mínimo actual no cubre ni el 10% de la canasta básica alimentaria fijada en 531 dólares, según cálculos del Cendas.
El estado Bolívar cuenta con un aproximado de 200 mil trabajadores públicos, puesto que la mayoría de los habitantes trabajan o tienen algún nexo de dependencia con la administración pública, dada la presencia de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) en la región. La activación económica bolivarense depende en gran medida de la recuperación salarial, puesto que la mayoría de sus habitantes dependen del ingreso establecido por el Ejecutivo nnacional.
Desde hace más de 6 años no hay salarios dignos en el país
En el año 2018, a través de una comisión de encuesta, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), concluyó que en Venezuela se violan los derechos laborales de los trabajadores, específicamente, aquellos referidos a la fijación de salario mínimo, la libertad sindical y la consulta tripartita. En 2022, esta organización inició un Foro de Diálogo Social en el país, el cual, según las centrales de trabajadores, no ofreció ningún resultado, pues su propuesta era aumentar el sueldo mínimo a 200 dólares, propuesta que no se concretó. A este monto llegaron a través de cálculos y estudios de las necesidades básicas de los venezolanos.
El convenio número 26 de la OIT establece los mecanismos para fijar salarios justos y, según la investigación de esta organización, desde 2018 hay irregularidades en esta área, lo que deja a los trabajadores del país desprotegidos ante la precarización de sus ingresos.
Esto no afecta únicamente a los trabajadores de la CVG, el gremio de la educación también permanece duramente golpeado. La secretaria del Colegio de Profesores en el estado Bolívar, Aida González, ha denunciado reiteradamente la crisis que viven los maestros en la región, sumada al detrimento de la infraestructura de las escuelas.
Ciudad Guayana también es una ciudad universitaria, puesto que en ella desarrollan actividades al menos tres universidades públicas. Para el dirigente sindical Raúl Brito, presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Nacional Experimental de Guayana (UNEG), es necesario recobrar el salario del docente, así como las condiciones de los planteles para los alumnos.
“La situación de los profesores universitarios es terrible. Los salarios de los profesores y empleados son salarios de indigente. Aproximadamente, un profesor gana 535 bolívares. Recordando que bono no es salario. Se requiere urgentemente un aumento salarial para los trabajadores universitarios y que nos devuelvan lo retenido en las cajas de ahorro. Tienen 25 meses retenidos de caja de ahorro. Que nos devuelvan la cuota sindical, que nos paguen las prestaciones sociales indexadas. Los trabajadores necesitan tener una vida de calidad. El ministro se comprometió a pagar dos años de uniformes a los universitarios y no ha cumplido. Durante el 2024, en el caso de la UNEG, el HCM está destruido. El presupuesto del año pasado se cumplió solo un tercio, se adeuda dinero. Los trabajadores necesitan un salario digno para vivir. La OIT fijó hace dos años una fórmula para discutir el salario y pidió iniciar con un salario de 200 dólares, el gobierno ofreció una propuesta de ingreso mínimo en la Constitución no existe esa concepción de ingreso mínimo. Exigimos salario”, declaró Brito en entrevista con este medio.
Recuperar la productividad: un punto clave en la discusión
Para el dirigente político Rachid Yasbek, la recuperación salarial pasa por la necesidad de una mejora en la productividad regional enfocándose en potenciar el sector industrial.
“Si tú haces un análisis de los costos que existen hoy, una persona debe ganar al menos, 100 dólares semanales. Si te pones a ver, el servicio de internet que es básico, está por el orden de los 30 dólares. Un mercado semanal para una familia de cuatro personas, debe estar en un mínimo de 80 dólares. Eso sería el dinero necesario para cubrir una canasta básica en la que debe estar la parte de esparcimiento, cualquier esparcimiento cuesta dinero. Fíjate que ya no se habla de aumento salarial, se habla de ingresos mínimos porque el salario de entrada, ya conceptualmente, para Nicolás Maduro, eso desapareció y está muerto. Porque el salario actualmente es de como de 3 dólares. Se está generando ingreso mínimo que son bonificaciones”, puntualizó Yasbek.
El dirigente recordó que en décadas pasadas las bonificaciones existían como un complemento al salario, siendo la fracción menor del sueldo y no representando más del 80% de este monto.
“La región Guayana que era una de las más pujantes, hoy está en la cola de las regiones en crecimiento. ¿Por qué? Porque no hay producción. Para tu planificar la mejora del salario tienes que arrancar por la producción. Uno de los embustes de este socialismo, es que se hablaba de la diversificación de la economía venezolana cuando ingresaba dinero por casi 3.3 millones de barriles diarios, hoy se está rasguñando cerquita del millón y se sigue basando la economía venezolana únicamente en el petróleo. Todos los comienzos de año, el señor Maduro jura por su mamá que este es el año de la economía, pero realmente hay una debacle”, acotó el líder opositor.