A dos meses de su instalación el pasado 1 de abril, la junta interventora de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) ya ha oficializado el nombramiento de nuevos presidentes para cuatro de las filiales del holding; sin embargo, trabajadores de las estatales afirman que la falta de autonomía económica y la centralización de poder ha reducido la presidencia a un cargo representativo e impide mejoras en las áreas productivas, así como la restitución de beneficios laborales.
Si bien hay nuevos rostros al mando, el personal asegura que todas las decisiones dependen de la junta interventora, cuyas primeras movidas buscan renovar la cúpula cevegista y desligar a la nueva gerencia de los cargos de corrupción y malversación de fondos que pesan sobre la gestión anterior.
La circunstancia priva a las nuevas gerencias de tomar decisiones que modifiquen el proceso productivo, salgan del presupuesto asignado o impliquen gastos adicionales.
Primeros nombramientos
CVG Venezolana de Aluminios (Venalum) fue la primera en cambiar su tren gerencial tras el nombramiento de Ángel González como presidente de la estatal del aluminio, asentado en la Gaceta Oficial Nº 42.612, el pasado 20 de abril. González fue precedido en el cargo por Wolfgang Coto, quien se hizo cargo de la compañía desde 2020.
González cuenta con una trayectoria de 30 años en Venalum. Durante 2021 se desempeñó como gerente general de planta en una época oscura para la compañía, ya que desde 2019 todas las celdas de la estatal estaban apagadas por la crisis energética, lo que se tradujo en la debacle productiva de la fábrica.
Su nombre se volvió reconocido durante 2021, cuando desempeñando su cargo en la gerencia general se negó a autorizar el desmontaje de 360 celdas de las líneas III y IV, entonces fue retirado del cargo por un mes. González asume la presidencia, según cifras oficiales, con 200 celdas activas de 905 que hay en la compañía.
“Sigue la misma arremetida contra los trabajadores. La mitad de los trabajadores están en sus casas. Ofrecieron entregarle bolsa de comida a los trabajadores desincorporados y no lo han hecho tampoco. No tenemos listín de pago”, José Amezquita |
En la Siderúrgica del Orinoco (Sidor) quedó un vacío de poder tras la detención de quien fuera su presidente desde 2020, Néstor Astudillo Leal, detenido en el operativo Caiga quien Caiga bajo cargo de corrupción.
Para la estatal del acero se designó como presidente al coronel Sandi Aldemar Villarroel, nombramiento publicado en la Gaceta Oficial Nº 42.616, del 26 de abril del año en curso. Villarroel es un militar con conocimiento en industrias, laboró durante el año 2017 en la Compañía Anónima Venezolana de Industrias -dedicada al desarrollo de armamentos-, donde se desempeñó como gerente general de Comercialización. Antes de ser nombrado presidente de Sidor ya formaba parte de la directiva de junta interventora.
Para Ferrominera Orinoco se designó como presidente al ingeniero Aldo Cantafio Buccafurni, nombramiento oficializado en la Gaceta 42.636. Cantafio tiene 33 años en Ferrominera y se desempeñó como vicepresidente de la anterior gestión, liderada por Abel Jiménez. Inició sus labores en la empresa en su sede de Ciudad Piar, donde fue gerente de operaciones mineras en 2013. Posteriormente fue gerente general de operaciones en Puerto Ordaz, sede en la que ascendió hasta la vicepresidencia ejecutiva.
En la misma gaceta se oficializó el nombramiento de José Ramón Graffe como presidente de CVG Carbones del Orinoco (Carbonorca), quien sucederá a Juan Rodríguez en el cargo. Graffe hizo carrera en CVG Venalum donde tuvo el cargo de gerente de carbón.
Recelo y desconfianza: trabajadores exigen cambios inmediatos
Desde principios de 2023, los trabajadores de las empresas básicas de Guayana vienen exigiendo un cambio en el tren gerencial de cada una de las compañías. A su vez, tras la llegada de la junta interventora, solicitaron procesos individuales en cada una de las estatales.
Hoy, ante el cambio en la directiva de estas empresas, manifiestan sentir suspicacias, puesto que hay casos en los que existen vínculos profundos con la anterior gestión, y otros en los que consideran que “no hay conocimiento en la materia por parte del designado”.
En este sentido, trabajadores de Ferrominera Orinoco venían exigiendo la destitución de Jiménez desde hace varios años, cuya gestión catalogan como la peor que ha tenido la compañía, caracterizándose por la desinversión y la baja producción. Asimismo recriminan los poderes que otorgó Jiménez a su padre, quien hasta la fecha tenía la administración del Club Caronoco, propiedad de la industria.
Nuestra exigencia es que la gerencia debe salir toda. Violaron todo. Convención colectiva en todos los aspectos, la libertad sindical. El trabajador que pedía una mascarilla era mandado a su casa suspendido. Un terrorismo que existió en la administración de Juan Rodríguez”, Ramón Espino |
“Aldo Cantafio conoce todo el proceso productivo de Ferrominera. Pero lo que deja a uno en incertidumbre es saber si podrá usar sus conocimientos para ponerlos al servicio del trabajador. Él era vicepresidente de la empresa, tenía todos los conocimientos de lo que acontecía en Ferrominera. Lo que ha venido desempeñando es un mandato directo político-partidista. Puede haber ganas de hacer las cosas, pero lo que hemos visto en este tiempo, da a pensar que no es así. Ojalá estemos equivocados. Ojalá que realmente cumpla”, declaró el secretario general del Sindicato de Trabajadores de Ferrominera Orinoco, Rubén González, quien consideró de vital importancia la restitución de los miembros del sindicato a sus puestos laborales al igual que de los delegados de prevención.
“Él es un cómplice de lo que pasó. Nunca se ha rebelado. Ha sido obediente con los mandatos. Ojalá empezara a impulsar los beneficios de los trabajadores, la recuperación de Sintraferrominera”, acotó González.
El trabajador César Marcano, con una trayectoria de 15 años en Ferrominera y miembro de la mesa de diálogo conformada por la Gobernación con trabajadores de base durante el mes de enero, consideró que los principales problemas a resolver para esta nueva gestión es reincorporar a los empleados que permanecen como no requeridos, mejorar los bajos índices de producción de la empresa y el remediar el incumplimiento de todos los beneficios de los trabajadores.
“En otra circunstancia, habríamos recibido de buena manera el nombramiento de Aldo Cantafio, pero lamentablemente está ligado a esta gestión nefasta de Abel Jiménez, esto nos causa cierto recelo. Apostamos a la buena gestión de este compañero”, manifestó.
Falta de autonomía: obstáculo para el cumplimiento del contrato colectivo y mejoras en planta
CVG Venalum recibe como presidente a un trabajador que hizo carrera durante tres décadas en la estatal del aluminio, los obreros declararon ver con buenos ojos el nombramiento de Ángel González, aunque temen que la falta de autonomía en cuanto a decisiones y presupuesto puede entorpecer la nueva gestión.
Hay que señalar que las empresas básicas ya no son autónomas en el manejo de sus recursos económicos, debido a que sus ganancias son enviadas al Ejecutivo quien decide el presupuesto a asignar en cada caso, a través de la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre), lo que deja a la presidencia con un papel meramente administrativo. Aunado a ello, la Onapre también puede rechazar solicitudes de presupuesto o de incrementos requeridos para el buen funcionamiento de las industrias.
El trabajador de Venalum José Amezquita, quien fungió como delegado de prevención de la empresa hasta salir como “no requerido” durante la pandemia, comentó sobre el nombramiento que “los trabajadores se sienten más libres al salir del yugo de Coto, ahora pueden hablar”.
Para los sidoristas el nombre de Sandi Villarroel no es conocido. El coronel provoca cierto recelo en los obreros, puesto que se han venido oponiendo a la militarización de las empresas básicas. A su vez enfatizaron en que, a pesar de ser una nueva gerencia, se sigue la misma línea política |
“Ahorita están pintando la planta, mejorando el alumbrado… Estéticamente la empresa tiene otra cara. Pero Ángel González puede estar de brazos atados con cosas que quiere solucionar como la reincorporación de no requeridos; los presidentes de las empresas no tienen suficiente autonomía. Están supeditados a lo que diga la junta interventora. Hay una máxima: el trabajador va a realizar un trabajo en una celda con 1.000 grados centígrados sin implementos de seguridad, lo hace por el salario. Los trabajadores tenemos que pensar en nuestra familia. Hay compañeros saliendo de vacaciones con 200 dólares para sobrevivir 40 días. Eso no alcanza para el mercado de un mes”, alegó Amezquita.
El secretario de trabajo y reclamo de Venalum, Fernando Serrano, considera a González como un excelente técnico, a pesar de que cuestionó que tras dos meses en el cargo no se ha restituido a los trabajadores no requeridos, ni ha habido respuestas para la problemática laboral.
“Sigue la misma arremetida contra los trabajadores. La mitad de los trabajadores están en sus casas. Ofrecieron entregarle bolsa de comida a los trabajadores desincorporados y no lo han hecho tampoco. No tenemos listín de pago. Esta persona puede dar mejores resultados, pero no siguiendo las mismas políticas. Lo conozco hace 30 años, no tengo dudas de su capacidad. Pero los beneficios de los trabajadores siguen sin estar. Nadie sabe cuánto gana. El problema del servicio de HCM. Queremos que se abra un comité de seguridad industrial de las empresas básicas. Hay muchos accidentes. Creo que solo vinieron a ver qué quedaba para seguir raspando la olla”, cerró Serrano.
“Mientras exista una administración dependiente del régimen, no habrá cambio”
Para los trabajadores de Sidor el nombre de Sandi Villarroel no es conocido. El coronel provoca cierto recelo en los obreros, puesto que se han venido oponiendo a la militarización de las empresas básicas. A su vez enfatizaron en que, a pesar de ser una nueva gerencia, se sigue la misma línea política.
Durante 2023, los trabajadores de Sidor han sido el grupo laboral que más ha protestado en contra de la precarización salarial y la falta de beneficios en las empresas básicas. Durante el mes de enero protestaron en la avenida Guayana durante cinco días consecutivos.
En ese entonces, el hoy detenido expresidente de la empresa, Néstor Astudillo, rechazó la manifestación y convocó a una contraprotesta oficialista en la estatal.
“Cometen el mismo error: poner a una persona sin conocimientos en el arte de la siderúrgica ni la producción de acero. Lo que sabemos es que la designación de él obedece a un quítate tú pa’ ponerme yo, que está haciendo el régimen. La junta interventora supuestamente vino para poner las cosas en su lugar y las cosas que van en su lugar son las que le convienen al régimen. Nosotros los trabajadores seguimos desactivados, las plantas sin inversión, el proceso productivo paralizado. No han avanzado en nada. Se puede colocar frente a la empresa una monja o un militar, pero deben cumplir con las funciones pensando en el para qué fue pensada Sidor. Para producir acero y generar ganancias. Ese es el resultado que necesita el país”, declaró Ángel Bolívar, trabajador de Sidor.
“Debe salir toda la gerencia”
Para el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de Carbonorca (Sutracarbonorca), Ramón Espino, el cambio en la presidencia debe venir respaldado de cambios en todo el tren gerencial, puesto que han venido violentando todos los derechos de los trabajadores.
Sobre la designación de Graffe, el sindicato se muestra expectante, considerando que su experiencia en la gerencia de Carbón de Venalum será provechosa para la administración de la compañía.
Sin embargo, tal y como los dirigentes de otras empresas, Espino se mostró preocupado por las condiciones de la planta, la cual necesita inversiones importantes y, hasta el momento, no hay recursos para que sean ejecutadas.
“Aún hay tiempo para recoger los espacios perdidos. Esa planta está en el suelo. Y el culpable principal es el señor Pedro Maldonado. Se jubilaron trabajadores sin la edad correspondiente, despidos injustificados, hay trabajadores desincorporados. Ahí el que hablaba lo suspendían y eso fue con la administración de Juan Rodríguez y todo el tren gerencial que está allí. Que no ha cambiado. Solo cambió el nombre del presidente. No puede quedar esa raíz negativa, los gerentes están allí. Se seguían lineamientos para dañar al trabajador y destruir la industria”, declaró Espino.
Espino denunció la jubilación de todos los miembros del sindicato, así como la permanencia de gerentes en edad de jubilación.
“Nuestra exigencia es que la gerencia debe salir toda. Violaron todo. Convención colectiva en todos los aspectos, la libertad sindical. El trabajador que pedía una mascarilla era mandado a su casa suspendido. Un terrorismo que existió en la administración de Juan Rodríguez y hay gerentes cómplices. Esa es la exigencia de los trabajadores y es lo que podría darle tranquilidad al trabajador”, cerró el dirigente.