viernes, 17 enero 2025
Search
Close this search box.
Search
Close this search box.

El encaje legal de Venezuela es cinco veces más alto que el promedio de la región

La banca venezolana se redujo tanto, que hoy la cartera de crédito de la banca consolidada, tanto pública como privada, es del tamaño de cualquier agencia de un banco de la región.

La prolongada hiperinflación que experimentó Venezuela entre finales de 2017 y 2021 llevó al gobierno a elevar el encaje legal a máximos niveles como un intento de frenar la espiral desenfrenada en la que se movían los precios. Pero un año después, cuando la inflación cede, el encaje sigue siendo el más elevado de la región.

En 2013, Venezuela tenía un encaje legal bancario de 17% y casi a final de ese año pasó a 22%. En 2019, el encaje legal ordinario pasó de 31% a 57% y el encaje marginal de 60% a 100%. En 2020, llegó a ubicarse en 93%.

Para el año 2013, el encaje de Venezuela se movía a los niveles que hoy tiene América Latina.

Datos del economista Leonardo Buniak revelados este jueves en el seminario Cómo presupuestar 2023 de la Cámara Venezolano Americana de Comercio e Industria (Venamcham) muestran que mientras Colombia tiene un encaje de 11% el de Venezuela es de 73%.

En febrero de este año, el gobierno de Nicolás Maduro redujo el encaje de 85% a 73%. Para entonces la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, anunció que posterior a la medida se haría una evaluación y que como se fuera “desempeñando” darían “una flexibilización expandida en el tiempo”. Pero siete meses después el encaje sigue estancado.

La banca es uno de los sectores que más se contrajo durante la crisis económica. Su tamaño se redujo tanto, que hoy la cartera de crédito de la banca consolidada venezolana, tanto pública como privada, es del tamaño de cualquier agencia de un banco de la región, como por ejemplo, de una agencia en Bogotá.

¿Por qué las autoridades llevaron el encaje a niveles tan altos?

El economista Alejandro Castro dice que debido al proceso de hiperinflación, que se mantuvo por cuatro años, el gobierno intentó controlarlo y llevó el encaje a 90%, de cada 100 bolívares ahorrados en la banca 90 debían ir a encaje, es decir, solo 10 de cada 100 bolívares podían ser prestados.

La medida trae como consecuencia que el crédito sea inexistente tanto para las empresas como para las personas y eso en una economía moderna lleva a que esta “difícilmente pueda avanzar, crecer y recuperarse”, apunta Castro.

La falta de crédito hace que los comercios y empresas deban trabajar con sus propios recursos y estos pueden ser, según el economista, préstamos de familiares y conocidos o con base en sus ganancias, pero “esto hace que una recuperación económica sea más lenta”, sobre todo, en un país que perdió 80% del tamaño de su economía entre 2013 y 2020.

La economía venezolana, que salió de la contracción el año pasado, de acuerdo con cifras oficiales (4%), podría crecer este 2022 entre 6% y 9%. La pregunta es por qué el gobierno mantiene un encaje tan alto, si este es uno de los combustibles que permitiría acelerar el crecimiento.

Bajar el encaje permitiría reactivar el crédito bancario tanto a personas naturales como jurídicas. Distintos especialistas coinciden que una medida así es vital para que la recuperación de la economía sea mucho más robusta de lo que ha sido hasta ahora.