sábado, 7 diciembre 2024
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Derogatoria de ley abre la puerta a libre compra y venta de divisas en el país pero sostiene control cambiario

Analistas económicos han sido enfáticos en señalar que la derogatoria de la Ley de Ilícitos Cambiarios no significa el desmontaje del régimen cambiario. El economista José Guerra planteó, incluso, que es probable que se instaure un sistema dual como el Recadi de la administración de Jaime Lusinchi y que, por cierto fue una fuente de corrupción como es ahora, el sistema que está impuesto desde 2003: en suma, es otra de las muestras del descontrol sobre el tema que demostró Hugo Chávez y que, ahora, mantiene Nicolás Maduro.

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La ilegítima Asamblea Nacional Constituyente aprobó este jueves un decreto derogatorio del Régimen de Ilícitos Cambiarios que si bien mantiene el control de cambio instaurado en Venezuela desde 2003, permite la libre compra y venta de divisas en el país, un mecanismo prohibido y sancionado penalmente por años.

El vicepresidente para el Área Económica, Tareck El Aissami, explicó frente al órgano oficialista -paralelo a la legal Asamblea Nacional de mayoría opositora- que el decreto busca respaldar las inversiones extranjeras y facilitar la realización de operaciones cambiarias de forma legal por parte de particulares “sin caer en mafias”.

“Con esta Ley de Ilícitos Cambiarios se pretende erradicar las casas de cambios ilegales y todo el mercado paralelo”, dijo.

 
En la presentación del decreto frente a la ilegítima ANC, estuvo presente todo el gabinete económico | Foto AVN
 

El articulado aprobado por la ANC deroga el Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Régimen Cambiario y sus Ilícitos, así como el artículo 138 del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley del Banco Central de Venezuela “en lo que concierne exclusivamente al ilícito referido a la actividad de negociación y comercio de divisas en el país”.

En una economía hiperinflacionaria, las operaciones de compraventa en el mercado venezolano -desde una consulta dental hasta la compra de cauchos o partes automotrices- han migrado del bolívar al dólar de manera progresiva. El Ejecutivo cuenta con el sistema Dicom, cuyo cambio se ubica en Bs. 172.800 por dólar, mientras que el mercado paralelo por el cual se rigen los venezolanos para transar productos y servicios promediaba este jueves Bs. 3,8 millones por dólar, una brecha amplia.

Las operaciones cambiarias que abre ahora la derogatoria de la Ley del Régimen Bancario y sus Ilícitos se realizarán a través de casas de cambio y entidades bancarias oficiales, que el Ejecutivo aún no ha precisado. Tampoco ha señalado bajo qué tasa se transarán las monedas extranjeras en estas casas comerciales, considerando que El Aissami enfatizó que “el objetivo es desplazar el mercado especulativo paralelo”.

El decreto derogatorio, precisó, entrará en vigencia el próximo 20 de agosto cuando está previsto el inicio de la reconversión monetaria con la eliminación de cinco ceros a la moneda, un mecanismo que los analistas económicos han advertido perderá vigencia en menos de seis meses debido a la intensa variación de los precios que el Fondo Monetario Internacional ha proyectado en 1.000.000% al cierre del 2018.

Ni desmontaje ni flexibilización

El economista Jesús Casique sostuvo que la derogatoria del régimen de ilícitos cambiarios no significa ni el desmontaje ni la flexibilización del control de cambio. “Los controles de cambio no son flexibles, siempre tienen penalidades y son draconianos, hay que esperar la Gaceta pero en lugar de modificar la ley debían desmontarlo porque ya hizo aguas. La solución era sencilla: unificación cambiaria y desmontar el control de cambio, que ha generado caída de las reservas, corrupción y procesos de arbitraje”, recalcó.

Tras 15 años de control de cambio, la caída de las reservas internacionales ha sido intensa de $ 21.366 millones al cierre de 2003 a $ 8.704 millones al primero de agosto de 2018, una caída de 59%.

“Esto no va a resolver el problema estructural de la economía. Tampoco significa que se va a bajar la hiperinflación, continuarán las distorsiones con un tipo de cambio disparado. Continúan las penalizaciones en la ley, ¿hasta qué punto esto va a generar confianza?”, se preguntó.

Casique sostuvo que detrás de esta medida está China, que solicitó mayor apertura cambiaria para concretar financiamiento con Venezuela, que -puntualizó- tiene serios problemas de flujo de caja.

“El gobierno está tratando de flexibilizar el control de cambio, pero si desea reactivar la economía debería reconocer y despenalizar el mercado secundario para que los agentes económicos obtengan sus divisas (…) Quien reciba remesas no va a vender por debajo del paralelo”, explicó.

Divisas de Pdvsa para la camarilla

El presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, aclaró que “todos los dólares que el Estado reciba deben ir a la inversión social”.

El economista y diputado a la Asamblea Nacional, Ángel Alvarado, manifestó a través de su cuenta en Twitter que el “Gobierno NO pretende el ‘tradicional’ mercado cambiario TRANSPARENTE donde Pdvsa vende divisas al BCV. Divisas serán para la camarilla de enchufados a precio de ganga que las podrán vender en un mercado libre. ¡Sigue la corrupción!”.

“El control de cambios sigue! Ya que es complejo entramado de disposiciones y convenios en Finanzas y BCV. Lo que están diciendo es que no van a perseguir la libre compra y venta entre particulares. Tanto que hablaron del $ Cúcuta para aceptar que ese no era el problema”, expresó en otro trino.

El también economista y diputado a la Asamblea Nacional, José Guerra, coincidió en que “la solución de fondo no es maquillar el control de cambio sino eliminarlo y que impere la libertad de cambio”.

A través de su cuenta en Twitter, Guerra manifestó que el control de cambio prosigue con la diferencia ahora, presume, que habrá un sistema dual con “un mercado oficial con una tasa de cambio preferencial solo para el gobierno y una tasa de cambio cara para el ciudadano. Lo mismo que cuando Recadi, en el gobierno de Lusinchi”, dijo.