lunes, 17 febrero 2025
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Brote de enfermedades vesiculares merma producción y comercialización de carne y lácteos en cuatro municipios de Bolívar

La falta de cobertura de vacunación, de control sanitario e inexistente capacidad de diagnóstico contribuyen con la reincidencia de enfermedades vesiculares. Los productores agropecuarios enfrentan el brote con pocos insumos a mano.

@mlclisanchez

Más de cinco unidades de producción en cuatro municipios del estado Bolívar (Piar, Padre Pedro Chien, Cedeño y Sifontes) están en cuarentena por brotes de enfermedades vesiculares en el ganado bovino.

Así lo informó la Federación de Productores Agropecuarios del estado Bolívar (Feproagro Bolívar).

Julio Malavé, representante de Fundación Venezolana de Servicios de Salud Animal (Funvesa) en el estado Bolívar, y técnico en producción agropecuaria con más de 25 años de experiencia, precisó que los brotes se ubican específicamente en El Manteco y sector El Hacha (Piar), La Pastora y Caicara del Orinoco (Cedeño), Tumeremo (Sifontes) y El Palmar (Padre Pedro Chien).

“El fin de semana el presidente de la Asociación de Ganaderos de El Manteco me reportó cuatro fincas más con brotes vesiculares. Ahorita estamos haciendo lo propio para tomar las muestras y mandarlas al laboratorio”, informó Malavé.

Necesitamos que cuando se envíe una prueba al laboratorio, nos digan qué cosa es realmente, a qué nos estamos enfrentando y que se hagan diagnósticos diferenciales”, Lourdes Silva

Ningún producto o subproducto animal o vegetal puede -o debería-, entrar ni salir en 15 kilómetros a la redonda por municipio o área afectada, hasta tanto no se tenga el diagnóstico de la enfermedad vesicular que está circulando, y se aplique el control correspondiente.

Los productores claman por apoyo gubernamental para evitar considerables pérdidas económicas y riesgos en la salud pública.

Las enfermedades vesiculares son un grupo de enfermedades virales que afectan a diferentes tipos de ganado como vacas, caballos, ovejas, cabras y cerdos. Provocan fiebre, malestar y la aparición de vesículas, erosiones y úlceras dolorosas en la boca, los ollares, el hocico, pezones, ubres y patas del ganado. Esto impide que los animales afectados coman, caminen y produzcan.

La estomatitis vesicular y la fiebre aftosa son algunas de estas enfermedades imposibles de diferenciar sin un diagnóstico clínico. Lo peligroso del caso es que la fiebre aftosa no es una zoonosis, es decir, no se transmite a los humanos, pero la estomatitis vesicular sí.

Merma en la producción, depreciación de productos retenidos

Hasta el momento se desconoce la magnitud del brote, y de cuánto será la pérdida económica generada por la disminución de la producción de carne, leche y queso, y la retención de mercancía que, dado el riesgo sanitario, no puede ser comercializada.

La baja cobertura de vacunación, falta de control de movilización en alcabalas sanitarias e inexistente capacidad diagnóstica, son factores que provocan la reincidencia de las enfermedades vesiculares que amenazan gravemente la producción de carne, leche y queso en el estado Bolívar.

Productores claman por el apoyo gubernamental para evitar considerables pérdidas económicas y riesgos en la salud pública

“Nosotros tomamos muestras en El Palmar que hicimos llegar a Maracay por vía aérea, y el diagnóstico fue estomatitis vesicular. Después enviamos las primeras pruebas de los demás sectores afectados, y desde el laboratorio nos dijeron que los reactivos para las pruebas diagnósticas están vencidos”, reportó Malavé.

Al respecto, presidente de la Federación de Productores Agropecuarios del estado Bolívar (Feproagro Bolívar) solicitó, una vez más al gobierno regional, el acompañamiento para erradicar la enfermedad y buscar soluciones que permitan recuperar la producción de carne y lácteos.

Los productores agropecuarios habían reportado una caída del 35% de la producción de carne, queso y leche durante 2022. El porcentaje aumentó a 60% para lo que va de año por falta de combustible e insumos, descontrol de enfermedades vesiculares y la expansión de la minería.

“Enfrentamos una lucha sanitaria importante, queremos erradicar la fiebre aftosa en nuestro estado y nuestro país para abrir nuestro comercio a diferentes países vecinos, tenemos ese gran potencial. Pero para todo eso necesitamos el acompañamiento del gobierno regional, para que nos ayude a buscar soluciones”, declaró Noel Naar, presidente del gremio.

“A Pdvsa les hemos dicho que si no tienen transporte nosotros lo colocamos, si no tienen sistema, lo reparamos porque nosotros estamos llenos de voluntad de seguir adelante”, agregó.

Diagnóstico incierto, fincas desatendidas por el Insai

La doctora Lourdes Silva, asesora técnica de Funvesa, informó que la mayoría de los municipios donde se detectó el ganado enfermo están desatendidos porque el Instituto Nacional de Salud Agrícola Integral (Insai) no tiene infraestructura para hacer el control epidemiológico, que consiste en recolectar las muestras para el diagnóstico oportuno, poner los predios infectados en cuarentena, desinfectar las áreas y vacunar al ganado desprotegido para procurar inmunidad de rebaño. 

Silva precisó que las pruebas para diagnosticar enfermedades vesiculares se hacen solo en Maracay, a 618 kilómetros del estado Bolívar. El Insai carece de equipos para la recolección de muestras, las pocas muestras que se toman no llegan en buenas condiciones por dificultades en el traslado, y los resultados tardan en llegar, o no llegan, porque los reactivos están vencidos.

La asesora técnica de Funvesa, Lourdes Silva informó que falta medio millón de cabezas de ganado por vacunar | Fotos William Urdaneta

“Necesitamos que cuando se envíe una prueba al laboratorio, nos digan qué cosa es realmente, a qué nos estamos enfrentando y que se hagan diagnósticos diferenciales. Que tengamos reactivos disponibles y personal capacitado”, manifestó Silva. 

Ante la falta de equipamiento del Insai, Funvesa junto a los productores agropecuarios son quienes procuran hacer la vigilancia epidemiológica, con las herramientas que tienen a mano, a través de los comités sanitarios locales.

“La vigilancia epidemiológica la están haciendo solamente los productores, que conscientemente denuncian los casos que tienen en sus fincas. Pero lamentablemente no se les atiende a tiempo, como se les tiene que atender”, denunció la especialista.

“No hay controles de movilización a través de alcabalas sanitarias. Quién mueve qué, a dónde va, de dónde viene, identificar las zonas de ceba en alerta porque es ahí donde llegan animales de varios sitios a pastar, y hay que poner atención en lo que es la vacunación”, agregó.

Es obligación del Estado instalar alcabalas sanitarias, regaderas y pediluvios para evitar la propagación de los virus.

Los animales enfermos ya no sirven para reproducirse, por lo que deben ser curados con tratamiento, y luego llevados al matadero para evitar la persistencia viral en las fincas.

Medio millón de cabezas de ganado sin vacunar

Silva informó que en el ciclo de vacunación pasado (entre octubre 2022 y enero 2023) lograron vacunar a 316.228 cabezas de ganado bovino, cifra que corresponde al 60% de la población total. Todavía queda medio millón de cabezas por vacunar.

Estas jornadas de vacunación se hacen con el apoyo de organizaciones no gubernamentales. La última jornada de vacunación que emprendió el Insai fue en 2016.

Entre 2018 y 2020, el estado Bolívar atravesó por una grave escasez de vacunas que diezmó al ganado de la región por enfermedades vesiculares. Sin embargo, los productores informaron que la disposición del biológico mejoró desde el año pasado por la intervención de las asociaciones de ganaderos y organizaciones no gubernamentales.

Enfrentamos una lucha sanitaria importante, queremos erradicar la fiebre aftosa en nuestro estado y nuestro país para abrir nuestro comercio a diferentes países vecinos, tenemos ese gran potencial”, Noel Naar

Tenemos que hacer un censo actualizado sobre cuántas fincas hay y cuántos biológicos se necesitan. Nosotros estamos trabajando con dos laboratorios, uno en Colombia y otro en Venezuela para la fabricación de los biológicos. Hasta el año pasado no teníamos suficientes biológicos, pero ya los hay”, acotó Malavé.

El productor denunció que la Gobernación del estado Bolívar hizo llamados para organizar ferias agropecuarias, mientras los productores están en plena brega con las enfermedades vesiculares.

“No podemos hacer movilizaciones de ganado ni de vehículos. El virus dura hasta 48 horas en una superficie. Es imprudente hacer un llamado a ferias agropecuarias, y esto lo digo con mucha responsabilidad”, manifestó.

Puertas cerradas al comercio internacional por falta de voluntad política para erradicar enfermedades vesiculares

Según la Federación Nacional de Ganaderos de Venezuela (Fedenaga), Venezuela es el único país del continente americano donde se presentan problemas de fiebre aftosa. Esto le cierra las puertas del comercio transfronterizo con países vecinos como Colombia y Brasil.

El estado de Roraima, por ejemplo, se declaró libre de fiebre aftosa y sería la primera opción para la comercialización de productos cárnicos si Bolívar estuviera libre de la enfermedad. “¿Cuánto valdría nuestro ganado en un estado libre de fiebre aftosa? ¿Cuánto valdrían nuestros subproductos? Estamos desaprovechando una oportunidad”, argumentó Silva.

En mayo de 2023, Colombia y Venezuela firmaron un acuerdo para eliminar la fiebre aftosa en América Latina, con el objetivo de convertir a América en el primer continente libre de esta enfermedad. Lo que contrasta con las declaraciones de Nicolás Maduro, cuando aseguró que en el país, la fiebre aftosa estaba erradicada.

Silva informó que desde el año pasado en el país se está implementando un Programa Nacional de Vigilancia, Prevención, Control y Erradicación de la Fiebre Aftosa, con el acompañamiento del Centro Panamericano de Fiebre Aftosa que funciona en Brasil.

“El estado Bolívar es uno de los estados piloto que entra en ese programa de vigilancia, investigación y caracterización epidemiológica. Pero necesitamos que el Estado asuma su responsabilidad”, dijo.