Trabajadores del canal del río Orinoco reclaman el incumplimiento de sus beneficios laborales y la minimización de sus actividades para ser realizadas por la recién creada empresa CVG Naviorca.
Señalan que cuando se formalizó la transferencia por parte del Instituto Nacional de Canalizaciones a la Corporación Venezolana de Guayana para el ejercicio de las competencias inherentes al canal de navegación del río Orinoco, CVG designó a los ingenieros Digrian José Romero Zabala (gerente) y Romina Silva Ayala (subgerente) para llevar las operaciones, y quienes además fungen simultáneamente como presidente y gerente de operaciones de la recién creada empresa CVG Naviorca.
Denuncian que luego de ocho meses la gerencia no ha demostrado preocupación alguna por el canal. “Se observa un canal de navegación sin ningún tipo de mantenimiento. Disminuida su capacidad para el tránsito de buques, principalmente por ausencia de dragado y señalización. Existen zonas críticas por falta de profundidad, especialmente en Boca Grande, y la señalización presenta anormalidades en más de un 70%”, sostienen en un comunicado de prensa.
Acusan a la empresa CVG Naviorca de pretender asumir y ejecutar la misión de la gerencia del canal del Orinoco “haciendo uso de los recursos económicos que ingresan, por el cobro de las tasas por uso del canal, y han efectuado adquisiciones de materiales y equipos para potenciar el funcionamiento de Naviorca, mostrando además la falta de independencia administrativa, funcional y operativa de ambas instituciones”.
Durante el primer semestre del año se ha realizado la carga y descarga de las mercancías en la zona de fondeo de la milla 44 del río, mediante el uso de grúas y motoempujadores con trenes de gabarras que evidencia el interés de Naviorca por mantener el canal de Navegación en su tramo Matanzas – Boca Grande, con condiciones no aptas para el tránsito de buques de gran calado.
Los trabajadores también exigen la restitución de todos los beneficios contractuales económicos y sociales que disfrutaban cuando pertenecían a la nómina de Incanal. (Con información de Prensa Trabajadores GCO)