Unas 80 mil toneladas de caña de azúcar están a punto de perderse en el ámbito nacional, pues los productores de cinco estados no han podido movilizar la materia prima hasta el principal central azucarero del centro del país por la escasez de gasoil.
Carlos Celli, presidente de la Sociedad de Cañicultores de los estados Aragua y Carabobo, confirmó que al menos 40 productores de Yaracuy, Cojedes, Portuguesa, Aragua y Carabobo, de un total de 170, temen perder la caña de azúcar recolectada para la zafra 2021, pues los camiones y gandolas no cuentan con combustible que les permita transportar la materia prima.
Las dificultades que atraviesan los cañicultores se vienen presentando desde hace semanas, pero fue el pasado fin de semana cuando el transporte pesado que se utiliza para la caña de azúcar se paralizó.
Luis Pérez, productor de Aragua, señala que desde el 13 de marzo la cosecha de caña de azúcar de cinco regiones del país dejó de arrimarse. Son 2.500 toneladas de caña al día que el central azucarero no ha recibido para su procesamiento.
Apoyo parcial
Los cañicultores han establecido reuniones con representantes de la ZODI Aragua para que se les garantice el suministro de combustible. De hecho, al inicio de la presente zafra, algunos productores lograron abastecer sus unidades de combustible, pero posteriormente no ha habido respuesta a sus solicitudes.
Los productores de caña de azúcar calculan que se requieren 35 mil litros de combustible todos los días, para garantizar el transporte y arrime de la caña de azúcar.
La paralización de la zafra prevista de enero a abril pone en riesgo no solo la materia prima ya cosechada, sino que también retrasaría las labores postcorte y de preparación de otras áreas de producción para las nuevas cosechas, previstas antes de la llegada de la temporada de lluvias.
Los trabajos de preparación para la cosecha de caña de azúcar requieren el uso de implementos y maquinarias que usan exclusivamente gasoil.
Tanto Celli como Pérez aclaran que el central azucarero El Palmar no ha paralizado su producción de azúcar o que se vaya a generar escasez de este rubro en el país. A Venezuela, además, el azúcar sigue llegando, aunque en detrimento de la producción nacional.
“Además de las fallas de combustible –explica Pérez– tenemos la competencia desleal frente a un producto importado que no paga impuestos”.