El Estado venezolano sigue en deuda con los pueblos indígenas no solo desde el punto de vista de los servicios básicos, alimentación y educación intercultural bilingüe, sino también desde aspectos claves como el derecho a su idioma.
Venancio García, gobernador indígena, llamó a las autoridades nacionales, encabezadas por Nicolás Maduro, para que procedan a intervenir ante el cúmulo de males que los aquejan.
El paseo Manamo es el principal lugar en el que, al llegar la noche, los waraos buscan acomodarse en alguna esquina para disponerse a improvisar con plásticos una especie de carpa y así tratar de protegerse del frío.
Desde hace 30 años viven en esta ribera del Orinoco y pasan los días hurgando en la basura para encontrar comida o chatarra para vender y de esa forma sobrevivir.
Desde 2017 ha aumentado significativamente la migración forzada de indígenas warao procedentes de Venezuela hacia Brasil. Algunos tienen más de cinco años viviendo en albergues.
María Teresa Belandria, representante en Brasil del gobierno interino, destacó que el flujo a la nación amazónica persistió a pesar de las medidas migratorias tomadas por ambos países.
Según el relato de pobladores de la zona, se presume que las víctimas eran migrantes e intentaron cruzar hacia Guyana en una embarcación que, debido al mal tiempo, habría naufragado.