Según los detalles del acuerdo, este fue aprobado de manera unánime por la junta directiva y se espera que llegue a término este año tras la luz verde de los accionistas.
Estamos en presencia de una verdadera guerra, aunque de naturaleza distinta a las anteriores, frías o calientes. Se trata de destruir principios y valores fundamentales para los verdaderos demócratas. Valores que trascienden los intereses secundarios y son los factores que unifican al mundo libre frente a las amenazas existentes. El enemigo es real.