La troncal 10, vía que comunica con el sur del estado Bolívar y Brasil, es considerada por transportistas como una vía de muerte por su deterioro, cuyos trabajos en el pasado han sido a medias y de mala calidad.
Una comisión nacional del Ministerio Público asistió al municipio Sifontes para investigar las denuncias hechas en contra del comandante del Fuerte Tarabay, Ernesto Solís.
Más desapariciones, amenazas de muerte, robos, persecución y hasta violaciones a mujeres son parte de la zozobra en el municipio Sifontes del estado Bolívar.
Al menos 30 minas de las zonas Corre Gente, Bochinche y Los Candados permanecen cerradas desde hace tres meses. Mineros exigen su reapertura “antes de que ocurra un estallido social en Tumeremo”.
Desde hace tres años son más de 400 denuncias de desaparecidos en Tumeremo. Madres y esposas denunciaron al comandante Ernesto Solís por los crímenes que mantienen en zozobra al pueblo.
Las lluvias del sábado inundaron diversos sectores en la localidad. “Primera vez en 35 años que una lluvia tan fuerte inunda tantos lugares”, destacó el presidente de la Cámara de Comercio del municipio Sifontes, Erick Leiva.
La protesta cesó antes del mediodía de este martes. Manifestantes denuncian que uniformados del Ejército restringieron el acceso a la zona minera, en la que habitan comunidades indígenas de la etnia kariña. Autoridades guardan silencio.
Los habitantes de Tumeremo habían escuchado rumores de que este fin de semana podría ser testigos de nuevos hechos de violencia. Y así fue: desde las 6:00 de la mañana de este sábado y a menos de quince días de la masacre de Los Candados (Sifontes), fuerzas estatales e integrantes de la banda ‘el Coporo0 se enfrentan, con balas y granadas, en La Caratica. Hasta la noche del sábado había siete muertes confirmadas (todas las víctimas, integrantes de la pandilla) en un hecho que ventila el descontrol gubernamental sobre las armas las zonas mineras.