
“Hamás ha incumplido partes del acuerdo alcanzado con los mediadores e Israel en un intento por obtener concesiones de último minuto”, dijo la oficina del primer ministro.
Según dos fuentes próximas a Hamás, en la primera fase del acuerdo se deberían liberar a 33 rehenes, a cambio de un millar de palestinos detenidos por Israel.
“La martirizada Ucrania sigue siendo golpeada por ataques a las ciudades que a veces dañan escuelas, hospitales e iglesias. Que callen las armas y resuenen los cantos navideños”, instó.
La violencia ha obligado a más de 1,2 millones de personas a abandonar sus hogares, más de la mitad de las cuales han cruzado la frontera hacia Siria, de acuerdo con datos del Gobierno libanés.
Las declaraciones fueron inusuales por la clara exposición de sus condiciones para acabar con la guerra en Ucrania, pero no incluyó nuevas exigencias.
A la petición se han sumado los presidentes de Francia y China, Emmanuel Macron y Xi Jinping, para que también permita avanzar en la búsqueda de soluciones.
De momento no se conocen los detalles de la propuesta, ni la postura de las autoridades israelíes.
Organizaciones y comunidad internacional advierten que una ofensiva supondría una catástrofe humanitaria aún mayor que la que ya están sufriendo los palestinos en el enclave.
Después del ataque de Hamás del 7 de octubre, Israel prometió aniquilar al movimiento islamista, considerado como una organización terrorista también por EE UU y la Unión Europea.
Aquella tregua de 1914 nos recuerda la importancia de buscar la paz y la reconciliación, incluso en medio de la adversidad.