Esta realidad de muchas mujeres y personas menstruantes, sobre todo en pueblos y comunidades populares, afecta directamente el libre desenvolvimiento de sus actividades durante el período.
Para la ONG es importante fomentar los beneficios de una buena gestión menstrual que disminuya las dificultades y desigualdades para lidiar con los días de sangrado y que promueva las buenas prácticas.