La Guardia Costera estadounidense informó de otra investigación oficial sobre la pérdida del sumergible, que intentará responder al por qué de la tragedia.
La implosión habría matado instantáneamente a los pasajeros del sumergible que desde el pasado domingo estaba desaparecido en aguas del Atlántico norte, y que desató cuatro días de búsqueda contrarreloj.
El vehículo operado por control remoto encontró el cono de cola del sumergible en el fondo del mar a unos 1.600 pies de distancia de la proa del Titanic y otros restos cercanos.