El Consejo de Ancianos del sector VI Akurimó, municipio Gran Sabana, celebró el primer juicio indígena, de acuerdo con sus usos y costumbres, a los 12 pemones acusados de terrorismo por asalto al parque de armas, en diciembre de 2019.
Doce pemones acusados de participar en la Operación Aurora fueron excarcelados bajo medidas cautelares en febrero de 2021. El decimotercero de ellos, Salvador Franco, murió mientras estaba recluido en El Rodeo II.
Al menos cuatro de los 12 indígenas continúan bajo las mismas condiciones en las que llegaron (sin atención médica, sin agua potable y sin alimentos de calidad), similares a la que precipitaron la muerte de Salvador Franco.
La élite, sumergida en sus orgías de escocés importado, no va a preocuparse por un indio preso y desnutrido. Sabía que el bacilo de Koch haría lo suyo al acabar con el sistema respiratorio de Salvador.
Desde su detención en diciembre de 2019, los 13 pemones no recibieron atención médica y fueron trasladados a una cárcel a más de 900 kilómetros de su lugar de origen.
Felicia Pérez, madre de tres de los 13 pemones detenidos en el asalto, informó que la empresa funeraria cobra 1.500 dólares por el traslado; por lo que considera que el gobierno debe hacerse cargo.
El indígena tenía un año detenido por el asalto al fuerte militar de Luepa en diciembre de 2019. Desde hace meses y con más intensidad en las últimas semanas, sus familiares y abogados reclamaban que se cumpliera la orden de traslado para recibir atención médica.