Carlos Cabello tuvo que enfrentar la angustia e incertidumbre mientras esperaba la prueba PCR que confirmaría si tenía COVID-19 o no. Murió sin contar con los insumos que necesitaba para sobrevivir al virus.
Un venezolano que regresó de Colombia relata los más de 20 días de un confinamiento sometido al hambre y desatendido, a pesar de que todas las pruebas de descarte de COVID-19 dieron negativas.