Personalidades políticas, incluido el alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui, caminaban por la pasarela cuando esta se vino abajo.
La medida se tomó luego de que por redes sociales el ingeniero geólogo Noel Mariño reportara el deterioro de los ojetes del puente colgante. Usuarios de Twitter exigieron a las autoridades la reparación urgente de una de las principales atracciones del parque.