El 15 de agosto colapsó el puente de Curaima, una zona rural y agrícola al este del municipio Padre Chien, en Bolívar. Los habitantes de ese y otros asentamientos campesinos cercanos deben cruzar en lancha para llegar hasta El Palmar.
Productores agropecuarios de Piar han denunciado en reiteradas oportunidades a un vecino de Valle El Candado por acoso para apoderarse de sus tierras. Estas denuncias no han prosperado, sin embargo, aseguran que el denunciado ha hecho contrademandas que sí han tenido respuesta, basado en falsos positivos.
El pasto que consume el ganado, la leche, el queso y los huevos de gallinas jersey, son producción 100% orgánica, iniciativa cuyo objetivo es ofrecer alimentación no transgénica y mejor calidad de vida a los hijos con autismo.
Pese a que han realizado denuncias en Fiscalía y otros organismos, se sienten amenazados por un vecino quien, presuntamente, pretende apoderarse de tierras propiedad de productores que allí hacen vida.
La Sociedad Venezolana de Ingenieros Agrónomos y Afines (Sviaa) prevé que la cosecha alcance para tres meses y propone abrir una cartera de créditos al sector primario para incentivar la producción y lograr así un abastecimiento seguro sin perjudicar al consumidor final. | Foto William Urdaneta
El déficit de gasoil ha limitado el traslado a las fincas, dejando las unidades de producción desprotegidas y a merced de la delincuencia, mientras las cosechas se pierden. | Foto William Urdaneta
Las dos fincas invadidas producen 1.000 vasos de leche por día y 27.500 kilos de toro en pie por trimestre, estimó Octavio Páez, vicepresidente de la Asociación de Ganaderos del municipio Piar. Sus propietarios tienen más de 30 años en el sector agropecuario. | Foto cortesía