La narrativa, que resultó un infundio, sin embargo tenía un inesperado correlato con la realidad: la quiebra de un banco en Skopje reveló la existencia de un anillo de empresas y sus dueños venezolanos, algunos muy cercanos a Pdvsa.
Destacó el compromiso y esfuerzo “de los trabajadores petroleros, quienes han trabajado incansablemente para restablecer las condiciones de normalidad en este importante complejo gasífero”.
Héctor Obregón, presidente de la estatal, destacó que para dinamizar la producción en la Faja del Orinoco se requieren 181 equipos, de los cuales 78 son taladros, 24 cabrias, 78 cabilleros y un coiled turbing. Mientras que en la División Oriente hace falta 89 equipos.
La Cámara de Comercio de Nueva Esparta advirtió que el plan de racionamiento eléctrico aplicado los ha llevado a la disminución significativa de las actividades en la región debido a que en algunos municipios se han registrado cortes de luz prolongados que van de 13 y hasta 20 horas.
Una fuente de la estatal petrolera afirmó que el accidente fue catalogado como “catastrófico” porque “destruyó la infraestructura estratégica de producción de gas y petróleo de Pdvsa”.
Cabe destacar que las instalaciones petroleras y eléctricas tienen habitualmente fuerte presencia de militares, pero el gobierno chavista suele denunciar ataques por los cuales culpa a la oposición.
Rodríguez hizo un reconocimiento a los trabajadores petroleros que han estado participando desde hace más de una semana en la recuperación de las instalaciones del complejo gasífero tras la explosión.
Semerene admitió ante la justicia del país norteamericano de que hizo parte de un plan ilícito que involucró a diez personas, entre ellos venezolanos, españoles y costarricenses.
Este importante complejo gasífero se encuentra al norte del estado Monagas, cerca de la población de Punta de Mata, entre los campos petroleros Musipán y Carito y es la base de todas las actividades de manejo de gas desarrolladas en el Distrito Norte de la División Punta de Mata de Pdvsa.
El general Jesús Zambrano Mata negó la posibilidad de que la falta de combustible sea consecuencia de desvíos de cisternas, alegando que actualmente el estado está recibiendo incluso más litraje que en meses anteriores.