
El oxígeno es tan necesario para nosotros como el propio alimento. No nos debería extrañar demasiado que sorprenda la supuesta primera excepción a esta regla aparentemente universal.
Cinco meses después de que se declarara la pandemia, miles de infectados con el coronavirus siguen recibiendo cloroquina e hidroxicloroquina. En la búsqueda de un tratamiento eficaz contra la enfermedad, la OMS y científicos independientes mantienen los ensayos clínicos con los antimaláricos.
La boliburguesía, como la bautizara hace añales el periodista Juan Carlos Zapata, se fue desplegando hasta convertirse en una especie de columna vertebral de la hegemonía. Tanto es así, que no es monocolor sino policromática.
El Chagas es curable si se diagnostica a tiempo y se trata con medicamentos que matan al parásito. No todos los chipos son vectores de la enfermedad, pero hay que saber cómo lucen y si uno es picado por alguno de ellos, hacerse las pruebas de inmediato.