Tras una semana fueron desalojados de la propiedad la madrugada del pasado 24 de junio por efectivos de la Policía del estado Bolívar y la Fiscalía Quince del Ministerio Público.
Los denunciantes afirman que ya ha habido múltiples intentos por dañar las bienhechurías del conjunto residencial. Aseguran que este miércoles nuevamente rompieron el cerco eléctrico de la urbanización.