Es la agotada pero satisfactoria sensación de la gente por haber labrado un proceso de transformación, sabiendo que no habrá impedimento por humillante y tortuoso que no pueda vencer. Esta será una navidad de expectativas.
A pesar de las continuas colocaciones de divisas en las mesas de cambio, el monto acumulado de intervención en el año es 12,98% inferior a los 5.400 millones de dólares vendidos en 2022.
Muchos padres afirman que ya no se pueden costear las marcas y productos que compraban hace años; sin embargo optan por adquirir presentaciones más económicas para sus hijos.
El 18 de diciembre se celebra el Día Mundial del Migrante. Escribí un cuento en el cual José y María salen del país caminando, buscando posada porque aquí no consiguen hospitales que los atiendan. Y en el camino consiguen niños y gente solidaria que les da una mano.
Estas casas son los espacios que se han esforzado por amortiguar la carencia afectiva de los niños, ante los retrasos en los procesos de adopción o colocación familiar, que condenan a los niños a crecer sin familia.
Mi carta al Niño Jesús de este año es para pedirle que a todas las mujeres que sufren de maltratos, les traiga el coraje para abandonar a su maltratador. Feliz Navidad para todas.
Aunque estemos en cuarentena prolongada, los venezolanos cantamos así sea en la casa. Navidad es un tiempo en el cual la música nos sale espontáneamente, para alabar al Niño, para pedirle regalos, para expresar preocupaciones, para protestar. Escribo sobre estos temas, pero con estrofas para cantar en Navidad.
“Ya se acerca el 2020 y al amanecer del primero de enero pensemos porque es el año en que recuperaremos la Asamblea Nacional de Venezuela”, expresó este jueves.
Nuestra columnista Luisa Pernalete recrea la historia del nacimiento del Niño Jesús, pero en San Félix, luego de un azaroso recorrido por el hospital de Guaiparo, en donde no pudieron atender a María.
“Necesitamos un respiro para tomar fuerzas y seguir construyendo tu reino, ese que tú anunciaste, de paz, de justicia, de fraternidad”. Esas fuerzas y deseos las pide Luisa Pernalete en su carta al Niño Jesús.