Cinco meses después de que se declarara la pandemia, miles de infectados con el coronavirus siguen recibiendo cloroquina e hidroxicloroquina. En la búsqueda de un tratamiento eficaz contra la enfermedad, la OMS y científicos independientes mantienen los ensayos clínicos con los antimaláricos.
En Caroní, Piar y Angostura del Orinoco el brote de malaria permanece activo. El Instituto de Salud Pública reconoce que se han dejado de entregar mosquiteros y que, al menos, tres muertes por paludismo se han reportado en Ciudad Guayana, y otras 13 están sin confirmar.
Carlos comenzó su carrera como médico en la Amazonía venezolana. Desde 2004 hasta 2007, atendió a poblaciones indígenas de las etnias e’ñepá y pemón en los ambulatorios de Maniapure y Wonken, en el estado Bolívar.
Denuncian que 302 indígenas están varados en Maripa, en el municipio Sucre del estado Bolívar, sin poder volver a sus comunidades por falta de combustible.
Un venezolano que regresó de Colombia relata los más de 20 días de un confinamiento sometido al hambre y desatendido, a pesar de que todas las pruebas de descarte de COVID-19 dieron negativas.
Las epidemias terminan cuando disminuyen los contagios y la enfermedad ya no representa un problema de salud pública. Controlar la enfermedad puede llevar a dos escenarios: eliminarla o erradicarla.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) está particularmente preocupada por la propagación de la COVID-19 en zonas endémicas por paludismo, como el estado Bolívar, debido al efecto negativo que causa la suspensión de la lucha antimalárica en países con sistemas sanitarios frágiles, pues esto significaría un resurgimiento de casos.
En la emergencia del hospital Ruiz y Páez, en Ciudad Bolívar, se acondicionó un área de aislamiento con un aproximado de 10 camas, 7 ventiladores y 12 monitores multiparámetros.
Médicos Unidos por Venezuela auspició un foro para debatir sobre la censura epidemiológica de cara a los casos de malaria y difteria y su incidencia sobre la alerta pandémica del coronavirus en América. Además se abordaron temas relacionados a la alimentación infantil y el autoestima colectivo en el marco del Día del Médico.
Según la Evaluación de Seguridad Alimentaria del Programa Mundial de Alimentos, la región Guayana es una de las zonas con mayor inseguridad alimentaria en el país: Delta Amacuro (21%), Amazonas (15%) y Bolívar (11%), debido a la vulnerabilidad económica de los ciudadanos y las fallas en los servicios públicos como agua y electricidad.