El presidente agradeció su trabajo a todos aquellos que ayudaron a que las justas olímpicas fueran un éxito.
La llegada al poder de la extrema derecha, por primera vez desde la Liberación de Francia de la ocupación de la Alemania nazi en 1945, sumaría un nuevo país en la Unión Europea (UE) gobernado por esta tendencia, como Italia.
“Estamos en un momento histórico para nuestro país”, afirmó el mandatario francés en una conferencia de prensa tres días después de convocar de forma anticipada los comicios.
Ursula von der Leyen, del PPE, tendió la mano a socialdemócratas y liberales para tratar de llegar a un acuerdo para construir una nueva mayoría proeuropea para los próximos cinco años de legislatura comunitaria.
La victoria de Bardella supuso un duro revés para Macron y para su primer ministro, que se implicaron ampliamente en la recta final de la campaña con el objetivo de frenar a la extrema derecha.
El presidente francés está convencido que van a inaugurar los Juegos Olímpicos París en las aguas del Sena, pese a las amenazas terroristas, pero afirmó que tienen un plan B y hasta uno C para el gran acto de apertura.
Macron advirtió que tanto él como Lula harán “todo lo posible para convencer a Maduro y al sistema a integrar a todos los candidatos y tener elecciones transparentes con observadores regionales e internacionales”.
Los organizadores de las justas olímpicas recibieron este jueves la llave de la Villa Olímpica, una “prueba”, a juicio del presidente Emmanuel Macron, de que Francia estará lista para acoger el gran evento deportivo mundial dentro de cinco meses.
En un comunicado conjunto, los participantes han expresado su apoyo al diálogo que se desarrolla en México entre el régimen de Nicolás Maduro y la oposición liderada por Juan Guaidó.
Las mociones de censura fueron presentadas por legisladores que estaban molestos porque presuntamente Macron hacía uso de poderes constitucionales especiales para forzar la aprobación de un proyecto de ley impopular.