
Todo muy progresista, todo muy de socialismo del siglo XXI, pero hay que arreglar y pagarle al fondo y a los bonistas. Un tire y afloje que no le será fácil a los Fernández, declaren lo que declaren.
La pregunta es si Alberto Fernández tendrá permitido el pleno uso de los poderes que entraña el cargo, o será un títere de Cristina Kirchner, y de su hijo Máximo, ambos procesados por corrupción y libres por sus fueros.
“Por más que todos vinieran ahora para Martínez no podría alcanzar a Lacalle Pou”, afirmó Fernando Vergara, secretario de la junta electoral de Montevideo.
Lacalle ya ha anunciado que será un gobierno multicolor, con un gabinete multicolor. Está decidido a afianzar esa alianza y necesita hacerlo por cuanto la tarea es difícil.
La exigua ventaja a favor de Luis Lacalle Pou impidió a la Corte Electoral proclamar a un presidente electo, ya que los 35.229 votos observados en las elecciones de Uruguay son superiores a los que existen entre ambos candidatos.